Además de la basura que tiran, afirman que también tiran residuos químicos y aceites al mar cuando lavan las lanchas.
Resguardos pesqueros siguen figurando como fuentes de contaminación a la ría y mar del puerto de Progreso y ahora se suman las naves de recreo, debido a la arroja desmedida de basura y agentes limpiadores de embarcaciones, ante la falta de conciencia del sector marítimo.
A lo largo de los refugios pesqueros de Progreso y sus comisarías costeras es posible observar acumulaciones de plásticos, bolsas, papel y demás desperdicios orgánicos e inorgánicos, situación que se extiende a las orillas de los muelles y playas del lugar.
Estos se hacen cada vez más visibles, aunado a que se arrojan sustancias toxicas y aceites a los cuerpos de agua, detergentes y demás productos químicos propios de la actividad y por el lavado de las naves, las cuales se realizan en el mar.
Ante esta situación se han venido presentado diversas situaciones y desequilibrios ecológicos, que de acuerdo con expertos podrían impactar negativamente al ecosistema y por tanto a especies de valor comercial afectando directamente a la economía de las poblaciones costeras, las cuales figuran como principales causantes de dichos desequilibrios.
De acuerdo con Juan Lara, biólogo experto en medusas, indicó que la contaminación en le ría de dicha zona ha provocado que las medusas encuentren condiciones ideales para su reproducción y ha desplazado a una enorme cantidad de especies locales hacia otros puntos, debido a la competencia por los recursos naturales del lugar, por lo que esto dio origen a la invasión de medusas en Chelem.
De igual forma, recintos pesqueros como Yucalpetén y la Caleta presentan un grave problema de acumulación de basura y arroja de aceites al agua, lo que ha generado afectaciones a las especies locales.
Se explicó que de seguir así, las condiciones podrían provocar la presencia de especies invasoras como ocurrió en Chelem.
Ante esto, agrupaciones ecologistas, como la asociación civil Lara Corella, comentaron la necesidad de educar y concientizar al sector pesquero y al sector marítimo turístico sobre la necesidad de mantener limpios los cuerpos de agua de sus desechos orgánicos e inorgánicos, pero sobre todo evitar la caída de aceites al agua.
Los llaman a eliminar las prácticas de lavado de lanchas dentro del mar, a fin de cuidar el ecosistema del cual obtienen los recursos para su subsistencia.
Fuente: Novedades Yucatán/Gerardo Keb
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