Piden ser más estrictos con los nuevos fraccionamientos que se construyan en Yucatán

Académico de la UNAM advierte que se debe regular la construcción.

Los planes y programas de desarrollo urbano en Yucatán tiene que ser más rigurosos y las autoridades de gobierno y las políticas deben ser más severos al autorizar los proyectos.

Así lo señaló Ricardo López Santillán, sociólogo urbanista e investigador del Centro Peninsular de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de México (UNAM).

Entrevistado durante el XXXIII Congreso Latinoamericano Alas México, el académico dijo que es necesario tener en cuenta los espacios de la naturaleza y asegurarse que sean incluyentes, públicos, de aéreas verdes no sólo desarrollos inmobiliarios y plazas.

Aseguró que Yucatán pasa por un fenómeno económico en el que la construcción está teniendo gran auge, por lo cual las autoridades encargadas de regular estas actividades deben ser muy meticulosas y cuidar que no se construya en todos los espacio, para que exista equilibrio entre lo construido procurando mantener “cinturones verdes”.

Espacios de la naturaleza

“Hay que tener en cuenta los espacios de la naturaleza, no todo es plazas comerciales y edificios altos”, afirmó el sociólogo urbanista, quien considera que en el Estado está siendo muy permisivo con las construcciones, muchas de ellas lejos de la ciudad, lo que conlleva a que la zona urbana se amplié sin una planeación correcta de los espacios públicos.

López Santillán comentó que la falta de aéreas verdes y la construcción en lugares distantes son sólo dos de los grandes problemas de urbanización, pues también se construye en zonas bajas o humedales y luego se presentan inundaciones.

En este sentido, manifestó que las comisarias de Mérida están perdiendo muchos de sus espacios verdes y públicos.

Advirtió que el impacto ambiental de la actividad humana ha deteriorado mucho la relación que se tiene con el planeta, y que en Yucatán los desarrollos inmobiliarios y construcciones de gran magnitud representan cambios morfológicos en la orografía que luego resultan perjudiciales para los habitantes, como es el caso de socavones e inundaciones.

Fuente: Novedades Yucatán/Grisel Chan