Productos han duplicado su precio, advierten agricultores.
Sin importar que no se trate de marcas registradas, que los productos no tengan las calcomanías que usan las grandes distribuidoras, la inflación económica también afecta a los pequeños productores agrícolas.
En consecuencia, se ven en la necesidad de encarecer sus productos, para hacer frente a los aumentos que han registrado insumos como abonos o fertilizantes.
horticultor en pequeño que cultiva lechuga, rábano, cilantro, chayote o calabaza, entre otros vegetales, quien dice que sigue un proceso que implica gastos para que su producción pueda llegar a la mesa de las familias.
En los cultivos se emplea pollinaza como abono, misma que se ha encarecido ya que hasta hace un año una tonelada costaba entre $1,400 a $1,600 y ahora está en $2,700 en el mercado.
Menciona otro ejemplo: una variedad de fertilizante pasó de $800 a $1,600, es decir, se duplicó el precio. Igual un paquete de semillas de rábano que se compraba en $1,165 y ahora ya está en $1,600.
“Todo ya subió de precio, no solo los productos básicos y con eso tenemos que adaptarnos porque tampoco podemos dejar la actividad ya que no hay empleo, hay que vivir con lo que sabemos hacer”, dijo.
Insecticidas, fungicidas, semillas e incluso mangueras de riego han duplicado sus precios: Es una inflación generalizada que estamos viviendo a nivel nacional”, dice.
La guerra Rusia Vs. Ucrania, un factor en los productos caros
La mayoría de los abonos y fertilizantes que se emplean en el campo son importados por lo que desde el año pasado cuando comenzó la guerra entre Ucrania y Rusia se dispararon los precios casi al doble.
Por lo consiguiente el encarecimiento de dichos insumos se ve reflejado en la economía de cada una de las familias.
En el mercado municipal gran parte de los locatarios produce sus propias mercancías, en tanto que otros tienen proveedores que provienen de comisarías.
Lo curioso del caso es que aunque son productos locales últimamente han estado subiendo el precio de los alimentos atribuyéndolo que es parte de la inflación y la guerra Ucrania-Rusia.
Dice que de alguna manera también lesiona a las amas de casa, pues si antes un atado de rábano les costaba $5 o $7, hoy están en $10 o incluso 15 pesos.
Añade que aunque no se recupera toda la inversión les alcanza para subsistir, fomentar empleos y mantener a sus familias.
Por otra parte dijo que después de la Feria de Tizimín, ahora se percibe una temporada baja para los locatarios del mercado municipal, solo esperan la cuaresma para que de nueva cuenta suban las ventas.
Fuentes: Diario de Yucatán.
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