¿Fecha de caducidad en los cosméticos? Hay que tomar en cuenta el olor y color
Algunos productos pueden durar hasta más de dos años cerrados
El polvo favorito de tocador pronto será retirado del catálogo, la crema está en oferta: cada tanto aparecen muchas buenas razones para comprar productos de cosmética y acumular un stock. Sin embargo, ¿cuánto tiempo pueden guardarse y cuándo hay que utilizarlos?
Básicamente la mayoría de los productos de cosmética duran sin abrir al menos 30 meses desde el día de su fabricación”, explica Birgit Huber, de la Asociación de la Industria de Detergentes y Cuidado Personal.
Si no se alcanza este plazo, debe indicarse una fecha de consumo preferente”, señala. Este puede encontrarse detallado en el envase de los respectivos artículos y puede examinarse antes de efectuar la compra acumulativa prevista.
Productos como geles de ducha, pastas dentífricas o cremas se mantienen, cerrados, durante más de 30 meses. O sea que, si se los almacena adecuadamente, pueden durar varios años sin perder calidad.
En lugar de una fecha de uso preferente, la vida útil después de la apertura se indica en el envase en meses, por ejemplo “6 M” para seis meses, en combinación con el símbolo de un tarro de crema abierto.
Pero también hay productos que no llevan este símbolo, por ejemplo, aquellos que se utilizan una única vez, como por ejemplo las muestras de producto”, apunta Huber.
Es bueno saber que la mayoría de los productos de cosmética pueden ser empleados más allá de la fecha de caducidad precisada en el envase. De hacerlo, deberá tener en cuenta el aspecto y el olor. En caso que estos se hayan alterado, es mejor descartar el artículo.
Por lo demás, quien quiera aumentar la durabilidad de cremas, bases de maquillajes y otros productos de cosmética deberán solamente abrir el envase cuando realmente van a utilizar el producto y luego volver a cerrarlo con cuidado.
Asimismo, es importante extraer las cremas directamente del tarro sólo con las manos limpias y es mejor utilizar una espátula para este fin.
Las esponjas de maquillaje, pinceles u otros utensilios para desmaquillar y aplicar el maquillaje también deben lavarse regularmente con jabón, detergente líquido o un champú suave, y sólo deben reutilizarse cuando vuelvan a estar completamente secos.
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Fuente: Excélsior/Vannesa Arteaga