Parque de Santiago, punto de reunión para coleccionistas en Mérida

El parque de Santiago, en Mérida, alberga al menos a 200 personas los domingos, acuden con un propósito, realizar una compra o el intercambio de algún producto

Sitio de reunión de coleccionistas de diversos objetos, el parque de Santiago parece una cápsula del tiempo donde se pueden ver piezas únicas, desde juguetes, peluches, muñecas de edición limitada, billetes y monedas con precios variables, pero lo más importante es que se vende la nostalgia.

De entrada llama la atención la existencia de videojuegos o de películas en video, objetos extraños para los nacidos en el siglo XXI, quienes mayormente no conocimos esa tecnología, pero que tiene su nicho de coleccionistas, quizá no para reproducirlas o jugar con ellas, según sea el caso, pero sí para conservar una ventana al pasado y despertar sus recuerdos.

Otro producto de alta estima son los carritos, las colecciones a escala que se venden, compran o intercambian, recordando la infancia cuando tuvieron su apogeo las autopistas y ahora únicamente quedan como objetos de colección.

Y aunque el de Santiago no es el único parque donde se instalan estos pequeños tianguis dominicales de intercambio, sí conserva el ambiente tranquilo de los barrios de Mérida, con un cine a su costado (el Rex, ya cerrado, pero se dice que lo reabrirán), con casas de más de un siglo, con una iglesia colonial y una escuela construida durante el Porfiriato en su costado Sur.

Durante el día la afluencia de personas es constate, al menos 200 se arremolinaban en un espacio pequeño, lo que hacía que pareciera aún mayor el número. Lo importante es que parecen ir con un propósito definido, tras un breve recorrido, realizan su compra o intercambio y se retiran satisfechos de haber encontrado un tesoro vintage o se van con la frustración de no haberlo conseguido, pero con la firme promesa de regresar la próxima semana.

Se pueden adquirir funkos, comics, peluches de diversos tamaños y de diferentes personajes populares de películas, series, anime, etc., entre los vendedores y los visitantes comparten comentarios y gustos de los artículos, pues muchos de ellos se maravillan de encontrar lo que requerían para su colección.

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Fuente: Por Esto/Iridiany Martín