Luego de tres días mucha tensión, ayer hubo cierta calma en el campamento montado por los empleados sindicalizados de la Alianza de Camioneros de Yucatán (ACY), que desde el lunes tienen sitiadas las instalaciones de la empresa de transporte urbano.
El líder sindical José Cabrera Villamil reiteró que este viernes esperarán a los representantes de la ACY para conciliar las liquidaciones de 150 trabajadores agremiados, por un monto estimado de 7.5 millones de pesos.
Aunque la intención era evitar perjuicios para los usuarios, las largas filas en los paraderos de las rutas que todavía tiene la Alianza fueron evidentes en horas pico. Cabrera Villamil señaló que no más de 30 unidades estarían fuera de circulación tras llegar a un principio, de acuerdo con Mario Bolio Granja, representante legal de la ACY.
“Serán unos 25 camiones, que son el 10 por ciento del total de la flotilla disponible, los que estarían inactivos”, expuso. Sin embargo, trascendió en redes sociales que finalmente habrían sido unos 50 y el presidente de la ACY, Arturo Rodríguez Berzunza, denunció en medios locales que los choferes en paro estaban presionando a sus compañeros en activo para que se unan a la manifestación.
Cabrera Villamil aclaró en la víspera que el detalle es que han buscado darle “rotación” a las bajas para que no sean los mismos choferes ni camiones los que estén prestando servicio. De tal manera que las afectaciones se habrían dado en el cambio de turno, al sacar varios autobuses de manera simultánea y darles cabida a otros en las rutas.
Asimismo, cuando Rodríguez Berzunza no se presentó a la junta pactada para el miércoles a las 11:00 horas, se habría incrementado el número de unidades “inmovilizadas”.
No obstante, el titular del sindicato compartió ayer que ya iban a liberar varias de las unidades que se encontraban dentro de las instalaciones de la ACY.
Su intención anunció, es quedarse con 24, una cifra menor que la manejada anteriormente, y a manera de “garantía”, en lo que avanza el proceso de liquidación de los empleados.
Por lo pronto, ayer igual se le dio acceso a personal administrativo de la Alianza para que constaten en los registros de la empresa, lo presentado por los abogados del Sindicato, en cuanto a lo que les corresponde por ley a los trabajadores agremiados.
De cuadrarse la información, en el encuentro de hoy podría darse el inicio de una mesa de trabajo para programar las fechas en las que los trabajadores serían citados para recibir lo que les toca.
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Fuente: PorEsto!/Armando Pérez