Consumir mero ya no es tan fácil por su bajo volumen
A pesar de que existe una veda del mero en Yucatán, se trata de una especie que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés) ha categorizado como una especie en peligro de extinción desde hace varios años.
Esta especie se encuentra sensiblemente afectada por la pesca furtiva, y en consecuencia, su biomasa se ha mantenido con periodos irregulares tendientes a la baja.
A pesar de que se pretende proteger a la especie en Yucatán con la veda del mero, que sólo dura dos meses (febrero y marzo), no existe información científica veraz que indique si esta medida ha funcionado.
Sin embargo, hay una esperanza para la continuidad de esta especie, ya que en el recién creado Parque Nacional Bajos del Norte (PNBN), ubicado frente a las costas del Estado, se pretende proteger la reproducción del mero.
El Parque abarca más de 1,304,114 hectáreas y es un conjunto de arrecifes localizados en el Banco de Campeche, a unos 240 kilómetros al noroeste de Progreso, Yucatán.
Estos arrecifes son espacios cruciales para la reproducción y crecimiento de larvas de especies como el mero rojo, el pulpo maya y la langosta espinosa, siendo el mero rojo la principal especie cuya restauración pretende esta nueva área.
¿Cómo se creó el Parque?
Entre los años 2021 y 2022, un grupo de científicos se embarcó en un par de viajes para desentrañar los misterios de las profundidades de esa área y así buscar pistas sobre lo que allí habita.
La información recolectada sirvió como base para que, a inicios de 2024, este lugar conocido como Bajos del Norte, fuera declarado por el Gobierno de México como una nueva Área Natural Protegida, la primera cien por ciento marina del Golfo de México.
Lo que es evidente para el ciudadano de a pie, es que actualmente no es tan fácil conseguir el mero en pescaderías y mercados, y si así fuera, su precio se ha incrementado.
Fuentes: Novedades Yucatán.