La revista especializada en salud The Lancet Public Health calculó que en el mundo hay alrededor de 80 millones de personas adictas a la ludopatía. En Yucatán, una organización que trabaja contra este vicio del juego de apuestas apenas atiende de 35 a 40 enfermos, pero la situación es grave en Mérida.
La gravedad de esta enfermedad mental se observa en afluencia de gente a los sitios de juego instalados en la ciudad, aunque las apuestas mediante aplicaciones digitales potenciaron la ludopatía en la entidad.
Incluso la demanda es tan alta que hay noticias de apertura de otros sitios de juego en la capital estatal.
Jorge, integrante de jugadores anónimos rehabilitados y que comparte su mala experiencia de la ludopatía en el grupo “Vuelve a vivir”, en Mérida, dijo que lleva 12 años de trabajo en la agrupación. Ha visto que la ludopatía crezca desmesuradamente por la adicción de los yucatecos a los juegos de azar y de apuestas.
Precisamente este gran mercado en Mérida y Yucatán ha ocasionado la proliferación de los casinos en la entidad, es común observar todos los días cómo cientos de personas de todos los estratos sociales y económicos acuden para apostar y jugar.
Incluso, ve que personas de la tercera edad son asiduos jugadores de los casinos, “por lo que es probable que los recursos de las pensiones vayan a las arcas de estas casas de juego”.
“Ya hay muchísima gente adentrada a este tipo de negocios. Como hay la necesidad de atender la demanda, abren más casinos en Mérida”, comentó.
“La OMS estableció que la ludopatía es una enfermedad y no es casualidad que estos negocios proliferen en la ciudad, principalmente en zonas de medio y alto poder económico”.
Hasta el momento no hay estudios en Yucatán que se especialicen en reflejar el grave problema, pero está a la vista el elevado crecimiento de esta adicción.
Sin embargo, la inmensa mayoría no reconoce esta alteración mental.
El entrevistado calculó que del 90% de los jugadores, el 10% sabe que tiene ludopatía, pero no lo reconoce. Sólo menos del 1% acepta la enfermedad y busca ayuda psicológica, psiquiátrica y en alguno de los dos grupos de jugadores anónimos que funcionan en la capital.
“No es medible este problema de ludopatía. En 12 años apenas hay dos grupos de autoayuda y está por abrir el tercero, pero hay baja asistencia por el estigma social de reconocer esta enfermedad”, señaló Jorge, que omitió sus apellidos, igual que todos sus compañeros porque precisamente son anónimos.
“Cuando no les funciona la terapia psicológica o psiquiátrica, acuden a los grupos de jugadores anónimos por ayuda porque su situación económica ya no aguanta más, están endeudados, quebrados y sin patrimonio porque empeñan y venden sus propiedades para apostar”.
Jorge afirmó que no hace falta algún estudio especializado sobre la adicción a los juegos de azar o apuestas. Solo basta visitar los casinos para ver que están llenos de adultos mayores, que son los clientes más visibles.
Sin embargo, hay miles de apostadores que utilizan el teléfono celular y apuestan hasta en casinos de Las Vegas en línea. Es decir, pueden jugar las 24 horas del día sin acudir al casino y desde su casa u oficina.
“Las apuestas en línea tienen un boom en esta época por las facilidades que ofrecen los celulares, principalmente para los jóvenes que manejan la tecnología y saben bajar las aplicaciones de las casas de apuesta”.
“Conocemos casos de jóvenes que gastan sus becas y el dinero que le dan sus padres para sus estudios y gastos. Ni siquiera tienen trabajo y los jóvenes de 19 a 21 años ya están endeudados en tarjetas bancarias o financieras porque tienen adicción a la ludopatía”.
“Es gravísima la ludopatía en Mérida, suceden muchas cosas con esta adicción que no salen a la luz pública, pero es una causa de suicidios porque no pueden cumplir con sus compromisos económicos, tienen deudas impagables, chantajean a sus familiares, piden préstamos a sus conocidos, es decir, la adicción los hace llegar a todo extremo, como vender todo lo que tienen o robar a sus familiares”.
¿Hay forma de controlar esta enfermedad?
“Sé que la Secretaría de Salud local tiene un programa de atención a las adicciones, donde está la ludopatía, pero un programa específico que se enfoque a atender esta enfermedad mental, no lo hay”, dijo.
“La experiencia que tenemos por haber sido enfermos de ludopatía es que quien la padece debe atender sus problemas de impulsividad y compulsividad y atender la parte emocional, porque generalmente en nuestra niñez traemos una complicación que nos lleva a una vida mal llevada, descuidada y normalizamos la adicción, como pasa con el alcohol y las drogas”, dijo.
“Hemos notado que la adicción a las apuestas es por emociones no trabajadas correctamente. La adicción es un escaparate y por ello a base de testimonios reales, como los que contamos durante las sesiones de jugadores anónimos, y cómo hemos superado este problema, son una medicina efectiva”, destacó.
“Sí se puede intervenir en la parte emocional y superar las causas que nos llevan a la ludopatía. La parte psicoemocional de la infancia es lo que nos arrastra a la adicción. Qué niño no jugó las cartillas, la pica raya y otros juegos inocentes donde se apuesta dinero en pequeñas cantidades, pero forma un hábito desde la niñez”.
“Quien tuvo carencias en su infancia y ve anuncios de los casinos de que puede volverse millonario y ganar para comprar un automóvil, ropa y zapatos de lujo, te lleva a las fantasías y quieres ganar dinero para superar esa etapa de carencias”, explicó Jorge.— Joaquín Chan Caamal
Finanzas Problema
“Cuando estas en la cúspide de la ludopatía no hay un límite de gastar el dinero”, dijo Jorge.
En busca de fondos
“Recurres a los préstamos, a los fraudes, al engaño y la mentira, robas a la familia y hasta puedes matar con tal de tener dinero para apostar”, advirtió.
Contacto
Jugadores Anónimos “Grupo Vuelve a Vivir” tiene juntas presenciales los lunes, miércoles y viernes, de 8 a 9:30 p.m.; los martes y jueves tiene juntas virtuales de 8 a 9:30 de la noche. Su local está en la Avenida alemán número 99-A entre 19 y 19-A, departamento 4, en la colonia Itzimná. Su número telefónico es 9995-45-29-25 y su correo es jugadoresanonimosvuelveavivir@gmail.com. En Facebook tienen la cuenta @JAVuelveAvivir.
Nota original aquí
Fuente: Diario de Yucatán/Joaquín Chan Caamal
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