Aunque el flujo turístico no ha disminuido significativamente, muchos visitantes han optado por alojamientos alternativos en lugar de hoteles tradicionales, lo que ha generado preocupación entre empresarios del rubro.
Jorge Escalante Bolio, empresario turístico local, explicó que este cambio de preferencia es evidente en los datos que manejan las agencias de excursiones:
«Aproximadamente el 60% de nuestros clientes se hospedaron en alojamientos tipo Airbnb, y solo el 40% lo hizo en hoteles. Esto demuestra que los turistas siguen llegando, pero eligen otras formas de hospedaje.»
Impacto económico y desafíos para la hotelería formal
Escalante destacó que esta tendencia representa un reto para la hotelería formal, ya que los ingresos que antes se concentraban en este sector ahora se dispersan en modelos de alojamiento no regulados. Esto afecta tanto la recaudación fiscal como la generación de empleos formales.
Además, enfatizó que muchas de estas alternativas de hospedaje operan fuera del marco regulatorio, sin las obligaciones legales o sanitarias que cumplen los hoteles establecidos, lo que crea una competencia desigual.
Fraudes y estafas: el otro riesgo del hospedaje digital
Otro tema de preocupación es el aumento de fraudes relacionados con reservas turísticas en línea. Escalante advirtió que hay un incremento de casos en los que los viajeros son víctimas de estafas al reservar hospedajes o paquetes turísticos a través de páginas falsas o sin verificar.
«Recomendamos contratar siempre con empresas registradas oficialmente. Si una oferta parece demasiado buena para ser verdad, probablemente lo sea,» afirmó.
Este tipo de situaciones también ha sido reportado por hoteleros de zonas turísticas como Paseo de Montejo, quienes han detectado páginas fraudulentas que suplantan la identidad de sus establecimientos para engañar a los usuarios.
Jorge Carrillo Sáenz, presidente del Consejo Empresarial Turístico (Cetur), confirmó que esta temporada han registrado intentos de fraude y extorsión dirigidos a turistas, lo que agrava aún más el panorama.
Factores económicos también influyen
Más allá de la competencia con Airbnb, las condiciones económicas actuales han influido en el comportamiento del turista nacional. Escalante explicó que el aumento de los gastos escolares, colegiaturas y otros compromisos del regreso a clases han limitado el presupuesto de muchas familias mexicanas, afectando sus decisiones de viaje.
El turismo de verano en Yucatán es mayoritariamente nacional, y aunque los hoteles de cuatro y cinco estrellas han mantenido una ocupación moderada, los de menor categoría —principalmente tres estrellas o menos— son los que más han resentido la baja.
Replantear estrategias ante un nuevo escenario turístico
Empresarios del sector coinciden en que es momento de revisar las estrategias de promoción y regulación turística. Más allá de invertir en publicidad, consideran necesario adaptarse a un mercado en transformación, donde las reglas de competencia ya no son iguales para todos.
«Tenemos que entender que el mercado ha cambiado, y que no todos los actores compiten bajo las mismas condiciones,» concluyó Escalante Bolio.
Redacción: Yucatánalamano.
