En medio de la presencia de trabajadores al servicio del estado quienes abarrotaron el salón de sesiones, el pleno del Poder Legislativo aprobó ayer por mayoría de los diputados de Morena, PVEM, PT, Movimiento Ciudadano y PRI la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores al Servicio del Estado, enviada por el gobernador, Joaquín Díaz Mena, que regresa la edad de jubilación a los 55 años, en lugar de los 65 años como establece la actual legislación que data de 2022.
Así mismo, se congela al 11% hasta 2030 la cuota de las aportaciones de los trabajadores para que ya no sea del 15% como establece actualmente. Después del año 2030 las aportaciones regresarán al 15%. La fracción parlamentaria del PAN votó en contra.
Al respecto, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, Wilmer Monforte Marfil manifestó que “no es posible que se equivoquen una vez, que tengan la oportunidad de rectificar y que no lo hagan, no es posible que sigan pensando en el dinero, en lo financiero, si bien el Isstey no vive su mejor momento, es obvio, como lo va vivir si los gobiernos del pasado usaron el dinero para otras cosas que es para los trabajadores. Piensen muy bien de qué lado están; del lado del pueblo o en contra del pueblo”.
El también coordinador de los diputados locales de Morena, dijo que la reforma al Isstey le devuelve sus derechos a los trabajadores, y agregó que seguirán buscando mejores condiciones salariales.
Al pronunciarse en contra, el diputado local por el PAN, Roger Torres Peniche dijo que con la nueva reforma se abrirá un “boquete financiero” en el Isstey que agotaría la liquidez de los recursos antes del 2028, dos años antes de lo que se había proyectando “incluso en los escenarios más pesimistas”.
“Lo que se pretende hacer hoy (por ayer) como una corrección constitucional es en realidad una decisión políticamente rentable pero financieramente insostenible”, dijo.
A su vez, el diputado local por el PRI, Gaspar Quintal Parra se manifestó a favor de la reforma al Isstey toda vez que se incluyó en el dictamen la propuesta priista de establecer la obligación del director del Isstey de someter a votación del Consejo Directivo las inversiones y operaciones financieras con las reservas del Instituto.
“Se elimina el salario regulador permitiendo que el cálculo de las pensiones se base en el 100% del promedio de los dos últimos años de cotización del servidor público; el reconocimiento de la edad para la jubilación voluntaria en 28 años de servicio para las mujeres y 30 años para los hombres; la supresión de la pérdida del derecho a pensión de las personas beneficiarias que contraigan matrimonio o establezcan una relación de concubinato”, dijo Quintal Parra.
Por su parte, la diputada local por Movimiento Ciudadano, Larisa Acosta Escalante al pronunciarse a favor del dictamen dijo que la nueva reforma del Isstey le devuelve a los trabajadores del Estado lo que la modificación del año 2022 les arrebató.
Fuente: Novedades Yucatán/Israel Cárdenas
