El centro histórico de este municipio se ha convertido en un estacionamiento improvisado para vehículos particulares como automóviles, camionetas y motocicletas, de los cuales los últimos citados en conjunto alcanza un promedio de 74.6% de ocupación en las calles principales, lo que genera complicaciones para los peatones y comerciantes de la zona.
El exceso de motocicletas estacionadas obstaculiza el paso de los motuleños, en especial de las personas con discapacidad y a las personas de la tercera edad.
Además, el caos vial afecta la imagen del Pueblo Mágico de Motul, Yucatán, que se incrementa en las quincenas y en los fines de semana.
En calles como la 27 desde la 30 hasta la 24, la 28 de la 25 hasta la 31, de la 26 desde la 31 hasta la 25 y la 29 entre 24 y 30, así como los alrededores de la plaza principal, cancha de básquetbol y el quiosco, están repletas de varias unidades empresariales de carga y descarga.
Autos y motocicletas invaden Motul, Yucatán, Pueblo Mágico
Incluso las bicicletas no se quedan atrás, cuyos propietarios usan las mallas que divide la cancha de básquetbol para encadenarlas.
Pese a que hay estacionamientos de paga como la de la calle 27 entre 28 y 26-A, a un costado de una farmacia, y otras dos ubicadas en la calle 28 entre 27 y 29 del comisario ejidal y una particular, no se dan abasto para atender la demanda de miles de los vehículos.
Además, se suman los estacionamientos de empresas como la de un reciente banco, donde sigilosamente muchos pobladores la usan para dejar sus unidades por horas y hasta en los fines de semana, cuando la sucursal cierra sus rejas.
Caos vial en Motul, Yucatán: autos, motos y bicicletas invaden las calles
De igual manera, hay un estacionamiento a un costado de la cancha de básquetbol, el cual cuidan y hasta administran los “viene, viene”, al igual que otro situado detrás del Palacio Municipal, administrada por la dirección de tesorería del Ayuntamiento.
La principal razón de que muchos habitantes opten por dejar sus vehículos por horas se debe a que acuden a sus centros de trabajo y escuelas en la capital yucateca.
Por ende, se trasladan en combis o camiones, aunque algunas compañías ofrecen transporte para sus empleados albañiles.
A esto se suma que locatarios del mercado, comensales de los restaurantes que no cuentan con estacionamiento y personas que tienen sus casas en el centro, dejan afuera sus autos o motos.
La problemática aumenta en los días de pagos de las pensiones del IMSS y del Bienestar, ya que los bancos se ubican en el centro histórico, aunado a los padres de familia acuden a llevar a sus hijos a la escuela primaria “Roque Jacinto Campos”.— Megamedia
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Fuente: Diario de Yucatán
