Cancelación de elecciones si hay pruebas de anomalías, advertencia de Mario Delgado
Critica a “gente que abiertamente está en contra del movimiento”
El presidente nacional de Morena, Mario Delgado, aseguró que el partido cancelará las elecciones en los distritos electorales en los que se compruebe el acarreo y compra de votos en la jornada de elección de congresistas nacionales.
En el primer día donde se han evidenciado el traslado de morenistas en camiones y la entrega de despensas y dinero, el líder nacional de Morena declaró que en los casos que existan pruebas de dichas actividades serán anuladas las elecciones en los distritos correspondientes.
Mario Delgado dijo que donde existan pruebas de delitos electorales, serán enviadas a las comisiones de Investigación y Justicia y junto con la Comisión de Honestidad se va evaluar si se cumplió con la convocatoria y si fueron elecciones libres o no.
Nosotros podríamos tomar decisiones, no vamos a permitir que en ningún distrito haya este tipo de prácticas y donde tengamos pruebas se anularía la votación en ese instante, no podemos permitir que esas viejas prácticas de otros partidos entren a nuestro movimiento”, aclaró.
Mario Delgado, quien acudió a votar al distrito 13 de Sala de Armas, alcaldía Iztacalco, reportó que hubo un incidente en Tehuacán, Puebla, por un presunto grupo de al menos 20 personas, quienes arrancaron papelería electoral.
El incidente de Puebla es que un grupo de 20 personas para tratar de impedir que hubiera la votación.
Arrancaron papelería electoral, sin embargo lograron resguardar el 90% de la papelería electoral y ya se restableció nuevamente la votación”, relató.
Mario Delgado detalló que 43 mil morenistas solicitaron ser congresistas, y sólo 42 mil 583 candidatos registrados en los 300 distritos electorales federales. El restante no cumplió con los requisitos al haber sido anteriormente candidatos por otros partidos.
Ante el anuncio que hizo el senador Ricardo Monreal de no participar en la elección al acusar que el proceso excluye y esta prefigurada la resolución, Mario Delgado respondió que respetaba su opinión, sin embargo, era un proceso organizado por el pueblo y libre y democrático.
No nos vamos a entretener en la gente que no quiere que nos organicemos. Hay gente que quisiera un partido desorganizado.
Yo respeto su opinión pero no estoy de acuerdo”, respondió.
En cuanto a las quejas que han emitido morenistas como Gibrán Ramírez Reyes, John Ackerman y Alejandro Rojas Díaz Durán, quienes dijeron ser excluidos, Mario Delgado respondió que “hay gente que abiertamente está en contra del movimiento, hay gente que está en contra del Presi- dente de la República”.
Bajo este criterio, el dirigente nacional cuestionó su intención de ser dirigentes de Morena si no coinciden con el presidente Andrés Manuel López Obrador y Morena.
Citlalli: Malas prácticas
Ante las evidencias expuestas de acarreo y compra de votos durante el proceso interno para la elección de congresistas nacionales de Morena, la secretaria general de Morena, Citlalli Hernández, reconoció que su partido va a tardar en construir una nueva cultura política.
Aseguró que se documentan las quejas de acarreo, violencia, compra de votos e intimidación para participar en el proceso electoral y e definirá qué procederá en la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia.
La morenista advirtió que los “pseudo liderazgos” que fomentan el acarreo y coacción del voto no tendrán cabida en el movimiento, aunque reconoció que existen elementos actualmente en las filas de Morena que aprendieron de los partidos políticos donde se formaron.
Convivimos en una cultura política tradicional, tratamos de construir un nueva cultura y creo que abrir las asambleas como lo hicimos pone en evidencia eso, compañeras, compañeros, ciudadanos que creen en una nueva forma de hacer política, pero también liderazgos o seudo liderazgos que creen que aquí se están disputando candidaturas y en ese sentido están ocupando malas prácticas”, respondió.
Citlalli Hernández y algunos militantes de Morena protagonizaron un conato de bronca en el estacionamiento de la Sala de Armas, una de las sedes donde se llevó a cabo la votación para la elección de congresistas nacionales del partido.
De acuerdo con su área de comunicación social el hecho ocurrió cuando la también senadora por Morena intentó frenar una pela entre militantes de Morena que se acusaban de comprar votos.
Fuentes: Excelsior.