
Dodgers celebra al estilo Hollywood
Los Dodgers superaron 5-4 a Tigers para ponerse con marca de 3-0 por primera vez desde 2016. ‘Ice Cube’ presentó el trofeo de la Serie Mundial
El beisbol en Los Ángeles no es sólo un deporte, es un espectáculo. Y cuando los Dodgers comienzan la defensa de un título, Hollywood se pone de pie. La tarde de su debut en casa tuvo de todo: una alfombra azul, Ice Cube entregando el trofeo, leyendas levantando el banderín y, por supuesto, un nuevo triunfo para mantener su paso perfecto en la temporada.
Vestidos con su uniforme con letras en dorado para conmemorar la victoria en la pasada Serie Mundial ante Yankees, Dodgers brilló como acostumbra en su pasado reciente.
El Dodger Stadium vivió un día que mezcló historia, nostalgia y puro dominio en el diamante. Después de abrir la campaña con dos victorias en la Tokio Series ante los Cubs, los monarcas de las Grandes Ligas regresaron a su feudo y superaron 5-4 a los Tigers para colocarse con récord de 3-0 por primera vez desde 2016.
El guion de la película de los Dodgers tuvo a Teoscar Hernández como protagonista en el primer acto. En la parte baja de la tercera, con dos hombres en base, Hernández cazó un lanzamiento de Tarik Skubal y lo mandó a las gradas. Un cuadrangular de tres carreras que puso en ventaja a Los Ángeles y marcó el destino del encuentro.
Skubal, quien había llegado al montículo con el peso de enfrentar a una ofensiva explosiva, sufrió los estragos de la maquinaria angelina. El premio Cy Young que obtuvo el año pasado, perdió brillo. En cinco entradas, permitió seis hits —dos de ellos jonrones—, cuatro carreras limpias y apenas pudo recetar dos ponches. Terminó cargando con la derrota.
Blake Snell, por su parte, hizo lo justo para llevarse su primera victoria como Dodger. Cinco episodios, dos carreras permitidas y una apertura que sirvió como puente hacia el bullpen.
Pero la magia no sólo estuvo en lo deportivo. Antes del juego, los Dodgers hicieron lo que mejor saben: convertir un simple partido en un evento cinematográfico. La franquicia celebró su octavo campeonato con una ceremonia en la que Ice Cube, el rapero angelino por excelencia, fue el encargado de presentar el trofeo de la Serie Mundial ante una afición que rugía de emoción.
El banderín del campeonato fue izado con la presencia de Magic Johnson y Billie Jean King, miembros del grupo de propietarios del equipo. Y en un gesto de reconocimiento a la comunidad, dos capitanes del departamento de bomberos de Los Ángeles y Pasadena fueron los encargados de revelar el letrero conmemorativo del título, en honor a su labor combatiendo los incendios que golpearon la región durante el invierno.
Si el preámbulo fue espectacular, el primer lanzamiento de la temporada en casa fue un homenaje a la historia. Kirk Gibson, el héroe de la Serie Mundial de 1988, quien con su mítico jonrón cojeando dejó una marca imborrable, lanzó la primera bola de la noche. El receptor no podía ser otro que Freddie Freeman, quien en 2024 también dejó una imagen para la eternidad con su grand slam en el Juego 1 contra los Yankees.
Los Dodgers celebraron, ganaron y dieron otro paso hacia su objetivo de repetir como campeones.
Nota original aquí
Fuente: Adrenalina