Embolia arterial: ¿Qué es y cómo puedes saber si eres propenso a una?
Una embolia arterial a menudo se presenta en las piernas o en el corazón, aumentando el riesgo de un ataque cardíaco; estos son los signos de alarma.
Ninguna persona está exenta de una enfermedad, por ello, es importante realizar chequeos médicos, por lo menos, dos veces al año para detectar cualquier padecimiento, entre ellos, una embolia.
¿Qué es una embolia arterial?
Una de las enfermedades mortales que existen es la embolia arterial, la cual se refiere a un coágulo (émbolo) que viene de otra parte del cuerpo y causa una interrupción repentina del flujo sanguíneo a un órgano o parte del cuerpo.
De acuerdo con la página de salud Medline Plus, la palabra “émbolos” significa más de un coágulo o pedazo de placa, es decir, “cuando el coágulo viaja desde el lugar donde se formó a otro lugar en el cuerpo, se denomina embolia”.
¿Qué causa una embolia arterial?
Medline Plus explica que una embolia arterial puede ser causada por uno o más coágulos. “Los coágulos se pueden atascar en una arteria y bloquear el flujo sanguíneo. Dicha obstrucción priva a los tejidos de sangre y oxígeno. Esto puede producir daño o muerte tisular (necrosis)”, detalla.
Los émbolos arteriales a menudo se presentan en las piernas y en los pies, los cuales pueden provocar un accidente cerebrovascular. Mientras que los que ocurren en el corazón aumentan el riesgo de un ataque cardíaco; los sitios menos comunes son los riñones, los intestinos y los ojos.
¿Cuáles son los síntomas de una embolia arterial?
Los factores de riesgo para una embolia arterial incluyen:
- Ritmo cardíaco anormal como la fibrilación auricular
- Lesión o daño a una pared arterial
- Afecciones que incrementen la coagulación de la sangre
Otra afección que ofrece un riesgo alto de embolia (especialmente en el cerebro) es la estenosis mitral. La endocarditis (infección del interior del corazón), la cual puede provocar émbolos arteriales.
Estos coágulos pueden desprenderse y bajar hasta las piernas y los pies. Incluso, puede trasladarse a una arteria y bloquear el flujo sanguíneo al cerebro (accidente cerebrovascular) u otros órganos.
Si un coágulo viaja y se aloja en las arterias que irrigan sangre a los pulmones, se denomina émbolo pulmonar.
Fuente: El Financiero