España obliga a rastros a tener cámaras para evitar maltrato animal

El gobierno español se jactó de ser el primer país de la UE que contará con un sistema de videovigilancia obligatorio en los mataderos.

España obligará a los rastros a instalar sistemas de video para vigilar que no se maltrata a los animales, anunció este martes el gobierno, asegurando que es una primicia en la Unión Europea.

«Somos el primer país de la Unión Europea que contará con un sistema de videovigilancia obligatorio en mataderos», informó en Twitter el ministerio de Consumo del gobierno del socialista Pedro Sánchez.

⭐ Somos el primer país de la Unión Europea que contará con un sistema de videovigilancia obligatorio en mataderos.

La nueva normativa supondrá una mejora en:
🐄 las condiciones de los animales
🧍 las garantías para los consumidores#VideovigilanciaMataderos pic.twitter.com/00ttZAqe3d

— Ministerio de Consumo (@consumogob) August 23, 2022

La medida fue aprobada como real decreto ley -lo que acelera su trámite legislativo- en la reunión semanal del ejecutivo, la primera después de las vacaciones de verano.

«Se trata de una norma que sitúa a España a la cabeza de Europa en esta materia y que, además de garantizar el bienestar de los animales durante su permanencia en los mataderos, mejora también las garantías de seguridad alimentaria para los consumidores», se congratuló el ministro de Consumo, Alberto Garzón.

Este real decreto «ha sido acordado con el sector, ha sido hablado con el sector», precisó en conferencia de prensa la portavoz del ejecutivo, Isabel Rodríguez.

Guillermo Moreno, director ejecutivo de Equalia, una ong que hizo campaña a favor de la medida, se congratuló por su adopción, estimando que «es un primer paso, necesario e importante, para elevar los estándares de bienestar animal en los mataderos», dijo.

Según Moreno, España se une a Inglaterra, Israel y Escocia en implantar este sistema.

El ministerio de Consumo precisó en un comunicado que las cámaras deberán cubrir «las instalaciones en las que se encuentren animales vivos, incluyendo las zonas de descarga, los pasillos de conducción» y las zonas donde se aturde y se desangra hasta la muerte a los animales.

Los responsables de los rastros deberán guardar las imágenes para comprobaciones posteriores por parte de las autoridades.

Los «grandes mataderos tendrán un plazo de un año para adaptarse a la nueva normativa y los pequeños, dos», precisó el ministerio.

Fuente: Excélsior