Por Ariel Irigoyen.
El investigador de la Cultura Maya de Yucatán, Freddy Poot Sosa declaró que el Gobierno Federal tiene que investigar a fondo lo sucedido en un rancho de Jalisco para aclarar si ese sitio se utilizaba como campo de adiestramiento de jóvenes para entrar al crímen organizado, o si de verdad se utilizaba para exterminio de secuestrados a través de hornos.
Poot Sosa recalcó que las autoridades estatales de Jalisco tienen que dar mayor información sobre ese polémico caso porque según madres de familias buscadoras de sus hijos desaparecidos, en ese rancho los asesinaban y sus cuerpos eran cremados con hornos al estilo régimen nazi, pero el Gobierno Federal insiste en que era un campo de adiestramiento de jóvenes para integrarse a las filas de crímen organizado.
Insistió que ese asunto debe de ser investigado a fondo por el Gobierno Federal porque resulta que, supuestamente, se habían encontrado ropa, vestidos mochilas, zapatos de caballeros, tenis, calzado de dama, entre otras prendas de vestir; pero cuando las madres buscadoras de sus hijos, entraron al rancho, simplemente no había nada de lo que se había afirmado que estaba allá.
Reiteró que es un asunto que está dividiendo a la sociedad mexicana, algunos padres de familia creen que ese rancho se utilizaba como de exterminio a los que eran secuestrados por los carteles de la droga, y otra parte de la sociedad creen que era un campo de adiestramiento; el pueblo exige la verdad, justicia y castigo a quienes desaparecen a hombres, mujeres y jóvenes, creando dolor a sus familias.
Finalmente Poot Sosa aseveró que ésto desde luego afecta a la imagen de México a nivel internacional, sobre todo cuando en nuestro país se prepara para recibir miles de turistas extranjeros por las vacaciones de Semana Santa que se aproxima, México está considerado un país de alta peligrosidad y violento para otros países, Estados Unidos y Canadá, y eso porque aún no se frena del todo a los carteles del crímen organizado.