Hipotiroidismo: ¿Cuál es la diferencia con el hipertiroidismo?
Tanto el hipertiroidismo como el hipotiroidismo son enfermedades que deben tratarse con un médico debido a que la glándula produce hormonas reguladoras en el cuerpo.
La tiroides es una glándula endócrina en forma de mariposa o escudo que se ubica en el centro del cuello y libera hormonas que circulan a través de la sangre, que son indispensables para regular el metabolismo, la frecuencia cardíaca, la temperatura, explica el Insabi.
Entre sus principales funciones, la tiroides produce almacena y libera hormonas que están vinculadas con el crecimiento, el mantenimiento de la mayor parte de las funciones corporales, además, influye en la regulación del sueño, el apetito y el carácter.
El alto nivel de yodo en el cuerpo, ingerir medicamentos para tratar la tiroides y el padecimiento de enfermedades graves pueden provocar problemas a esta glándula como el hipertiroidismo o el hipotiroidismo.
¿Qué es el hipotiroidismo?
El hipotiroidismo es un un trastorno que afecta en mayor medida a las mujeres, en el que la glándula de tiroides no puede producir suficiente hormona tiroidea para mantener al cuerpo funcionando de manera normal y, de acuerdo con la Organización Americana de la Tiroides, hace que los procesos corporales funcionen con lentitud.
La dependencia argumenta que el hipotiroidismo genera reacciones metabólicas diversas, mismas que pueden hacer que las personas ganen o pierdan peso, generando obesidad en algunos casos.
Uno de los síntomas de la enfermedad es el aumento en el apetito, por lo que algunas personas que padecen la enfermedad enfrentan obesidad debido al aumento de calorías consumidas.
¿Cuál es la diferencia del hipertiroidismo?
El hipertiroidismo ocurre cuando la glándula tiroides produce más hormonas tiroideas de las que el cuerpo necesita. Sin embargo, pese al aumento del apetito, esta afección provoca adelgazamiento excesivo a las personas que lo padecen.
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, las personas con hipertiroidismo pueden presentar los siguientes síntomas:
- Nerviosismo o irritabilidad.
- Fatiga.
- Debilidad muscular.
- Poca tolerancia al calor.
- Problemas para dormir.
- Temblores.
- Latidos cardíacos irregulares.
- Pérdida de peso.
Fuente: El Financiero