domingo, noviembre 24

Informalidad en Yucatán pone en una balanza negativa al comercio formal: Canaco

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El presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida (Canacome), Levy Abraham Macari, admitió que la economía informal rebasa a la economía formal en Yucatán, donde tienen porcentajes extraoficiales de 55% a 60%.

Es decir, es una balanza negativa para los comercios y negocios formales.

“Tiene algo de razón el Inegi al decir que la economía informal ha crecido. De eso no hay duda, vemos la proliferación y el crecimiento de los comercios informales en Mérida que venden arbolitos de Navidad, luces, adornos y una variedad de artículos en lugares donde no hay locales establecidos como las calles, avenidas y aceras”, señaló.

“Definitivamente hay una proliferación del ambulantaje y la economía informal, desde nuestra perspectiva, va ganando más terreno”.

El Inegi publicó los resultados de la Medición de la Economía Informal (MEI) el lunes 18 pasado. Reportó que la economía informal aumentó 0.4% en 2022 en el país y que la actividad aporta 24.4% del PIB nacional.

”Estamos acostumbrados a la informalidad”

Abraham Macari afirmó que en todas partes se ve la presencia de la informalidad por medio del ambulantaje, no sólo en Mérida, sino en cualquier plaza pública del interior del estado. Donde uno llegue, siempre verá vendedores de todo tipo de cosas en las calles y aceras.

“Creo que el gobierno federal no ha hecho precisamente la mejor labor para que la formalidad sea un estilo de vida”, señaló al pedir su opinión sobre este tema de la informalidad creciente en México.

“Estamos acostumbrados que la informalidad y la falta pago de impuestos sea una de las formas de vida del mexicano. Estamos acostumbrados a que no haya incentivos del gobierno federal para que los comerciantes pasen a la formalidad”.

“En este momento todas las exigencias, todos los permisos, todas las solicitudes, todo lo que tienes que cumplir para que un comercio sea formal es demasiado. Mucha gente considera que no está a su alcance ser formal y decide vender cosas desde el punto de vista informal”.

Potencial de cambio

El líder de la Canaco afirmó que la informalidad es generalizada en el país, pero al menos en Yucatán existen las condiciones en estos momentos para disminuir al mínimo o para acabar con la informalidad de manera ordenada y consciente.

“La Canaco tiene cifras extraoficiales de que la economía informal es de 55% a 60% en el estado”, dijo. “Son cifras que no han disminuido en los últimos años. Hemos hecho esfuerzos interesantes en mesas de trabajo con el Ayuntamiento de Mérida y el gobierno estatal para que los informales migren a la formalidad, pero no ha dado resultado esta estrategia”.

“La realidad es que hoy hay una coyuntura muy interesante en Yucatán. Estamos en un muy buen momento para diseñar una estrategia integral porque hay más oferta de empleos que trabajadores disponibles”, consideró.

“Hay oportunidades de trabajo para las personas que trabajan en la informalidad y que pasen a la formalidad. Hoy pueden encontrar un empleo de lo que le gusten, a la empresa a la que vaya verán que están contratando personal. Hay trabajos de todos los colores y sabores, tanto en la industria y el comercio”.

“Todos estamos contratando personal, hoy hay una buena sinergia para que aquellos que viven en la informalidad tengan un empleo con seguridad social, con prestaciones sociales y económicas, que tengan acceso a créditos del Infonavit, a préstamos bancarios”, señaló con optimismo.

“La gente podría migrar al trabajo formal y tener todas las prestaciones empresariales, lo que no podrán obtener en la informalidad”.

Ventas navideñas en Yucatán

Abraham Macari informó que en esta temporada decembrina la Canaco trabaja muy de la mano con el Ayuntamiento de Mérida porque necesita que los comerciantes formales del Centro no estén invadidos por los ambulantes, pues es el mes en que los empresarios formales pueden mejorar sus ingresos mediante las ventas para afrontar los pagos de aguinaldos y los meses críticos de inicio de año.

El Centro Histórico es donde más proliferan los ambulantes, pero también en los tianguis de los parques de las colonias, en las avenidas principales se ven vendedores informales que afectan a los comercios establecidos.

El líder de la Canacome detalló los perjuicios que ocasionan los vendedores ambulantes que son los que generan la economía informal. Además, propician una baja en las ventas de los negocios formales, los empresarios formales pagan sus impuestos y derechos, pagan a los empleados, pagan las prestaciones sociales y médicas.

En cambio, dijo, los informales no contribuyen a las arcas de los gobiernos, invaden los espacios públicos y venden más barato, lo que los convierte en competencia desleal, además que venden artículos de procedencia desconocida.

Precisamente por todos estos factores la Canaco exhorta a los consumidores de que compren en negocios formales, además que si algún producto o artículo sale fallado el comercio informal no soluciona el problema, lo que sí hace el comercio formal.

“Lo que se necesita para diferenciar la informalidad de la formalidad es que haya mejores condiciones y beneficios para los negocios formales”, consideró. “Los informales no tienen ningún costo en su actividad, los formales sí necesitamos recuperar de alguna manera las ventas y pagar correctamente a los empleados”.

Informalidad también sería parte de la ilegalidad

Se le preguntó si sabe de dónde vienen los artículos y productos que venden en la vía pública de Mérida y de Yucatán, y respondió:

“Nunca hemos hecho un análisis de donde viene todo eso porque le compete a Hacienda federal. No podemos saber de dónde viene, pero es una mercancía que no tiene garantía y podría venir de cualquier lugar, podría ser robada, mercancía ilegal, que entra a través de las fronteras del país sin supervisión de las aduanas”.

“Podría ser que lo compren en una tienda formal y lo revendan, pero como no tienen una revisión ni nadie les pregunta, toda la mercancía que venden en las calles, en los tianguis y las avenidas es de dudosa procedencia”.

¿Tiene solución este problema de la informalidad o seguirá creciendo en los próximos años?

“Creo que sí tiene solución. Depende de los tres órdenes de gobierno, depende de la voluntad política porque para que una empresa se vuelva formal necesita incentivos, necesita beneficios fiscales, se necesita un promotor de la formalidad y todos los costos desincentivan”, señaló.

“Recuerdo que en la administración municipal de Manuel Fuentes se solucionó el problema del ambulantaje callejero. No había ambulantes en las calles. Hicieron un acuerdo autoridad y vendedores y entraron todos a los mercados”.

Abraham Macari recalcó que la intención de este combate a la informalidad no es que la gente que necesita vender sus cosas no lo pueda hacer. Simplemente, si tiene algo que vender, que lo haga de manera ordenada, correcta y en un sitio destinado para el comercio. Esa sería una forma de que todos estén en las mismas condiciones y todos contribuyan a la economía formal.

Hay mercados con espacios vacíos y abandonados, como San Sebastián, San Benito, La Pepita, se le planteó.

“Es un muy buen momento para acordar con los ambulantes, que están bastantes organizados, que hagan un esfuerzo para volver a limpiar las calles de vendedores”, señaló.

“Con apoyo de los gobiernos estatal y municipal, que con una inversión interesante, podrían mejorar las condiciones de los mercados para que todo comerciante de la calle esté en esos lugares específicos”.

¿Se puede disminuir la economía informal?

“Me preguntaste si se puede disminuir o acabar con la economía informal, te digo: sí se puede. Sólo hay que ponernos de acuerdo entre todos. Sí es viable acabar con la informalidad, es un tema de voluntad política y de acuerdos entre los distintos niveles de gobierno y vendedores”.

El empresario destacó que la remodelación de los mercados requiere la participación de los locatarios y vendedores para que ellos expliquen las condiciones que necesitan para que ocupen los espacios, permanezcan en ellos y no vuelvan a salir a las calles.

Además, tendría que ser un acuerdo con voluntad política porque es bien sabido que estando afuera del mercado venden más y, por ello, nunca querrán entrar por sí solos.

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