Por Yael Rodriguez
Un 35% de las viviendas en el Centro Histórico de Mérida, cerca de 11 mil inmuebles, están abandonadas por factores como herencias sin resolver, litigios, migración de propietarios y elevados costos de mantenimiento.
De acuerdo con Jaime González, desarrollador inmobiliario y expresidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) Playa del Carmen, esta iniciativa no solo sirve para darle una nueva vida a estos históricos edificios restaurándolas y conservando su estilo arquitectónico, sino que también serviría para movilizar la economía local con mejores y más oportunidades de empleo.
Sin embargo, el proceso enfrenta retos como las complicaciones legales por herencias múltiples, altos costos de restauración y la necesidad de políticas públicas que faciliten la rehabilitación antes de que los inmuebles se deterioren o se transformen en espacios poco acordes con el entorno.
Las casas del Centro Histórico rondan en un valor superior a los 15 millones de pesos, lo que refleja su demanda y el desafío económico de su rescate.
El Ayuntamiento de Mérida, junto con instituciones como Infonavit, trabaja en esquemas para reubicar estas viviendas a personas necesitadas, buscando mejorar la calidad de vida y la seguridad vecinal.
Esta iniciativa del sector inmobiliario busca rescatar estas casas abandonadas en una estrategia clave para unir preservación cultural con desarrollo económico y social, ofreciendo un futuro urbano más sustentable y atractivo para Mérida.