Por Ariel Irigoyen.
El presidente de la Unión Ganadera Regional de Yucatán (UGRY), Roger Díaz Mendoza declaró que la intensa lluvia que cayó en Yucatán en días pasados ayudó de gran manera a evitar siniestros naturales porque ya se estaban registrando algunos conatos de incendios debido a las altas temperaturas que se registran en el Estado.
Agregó que los pequeños ganaderos han construido sus guardarrayas para proteger sus ranchos de la presencia del fuego, de todas maneras hacen falta más lluvias para reducir la posibilidad de más incendios porque estamos en esa temporada de alerta y prevención en el Estado.
Subrayó que la buena precipitación pluvial que cayó en días pasados es un alivio para los pequeños ganaderos porque las tierras húmedas van a permitir el crecimiento de pastizales que es el alimento del ganado, por lo que hace falta más temporal para que crezca la hierba, y las reses tengan con qué alimentarse algunas semanas.
Puntualizó que ya estamos por entrar a la primavera este 21 de marzo, y empieza la etapa más intensa de calor, de prolongada sequía y mayor riesgo de siniestros naturales; los socios de la UGRY están preparados para ésta etapa que ya se aproxima para atender al ganado con alimentos balanceados.
Finalmente, Díaz Mendoza destacó que esperan apoyos de alimentos balanceados, pasto seco y cortado a través del Gobierno Federal, también del Gobierno del Estado para que puedan atender mejor a la reses que pierden peso y calidad en sus carnes por las altas temperaturas, la escasez de lluvias y la falta de pastizales que es el principal alimento del hato ganadero.