Exclusivo de Diario de Yucatán
Por Mariana Pacheco Ortiz
Nota original aquí
‘Lexi’ (nombre ficticio para reservar su identidad), de 13 años, dice que está huyendo y busca protección. Consigue que la remitan a un refugio de jóvenes víctimas de trata de personas y explotación sexual. Le bastan días para enganchar a cinco chicas, algunas de ellas, adictas en rehabilitación, atraídas con la promesa de la droga.
Una noche, en una acción coordinada desde el exterior, logran sustraerlas a ella y otras dos menores para regresarlas a la actividad que a, su corta edad, conocen muy bien. No es una historia más de esos estados muy renombrados en ilícitos: ocurre en Yucatán, hace apenas semanas atrás.
María de Jesús Ocaña Dorantes, fundadora del refugio Casa Crisal y Proyecto Crisal, expone a Diario de Yucatán el modo en que ocurrió la infiltración, la sustracción colectiva ocurrida el 24 de junio, otra evasión posterior, las reacciones de autoridades, la situación actual, así como otros elementos del terrorífico comercio humano en la entidad.
Una red de explotación sexual
‘Lexi’ llegó de otro estado de la República. Nunca proporcionó su nombre real y las inconsistencias llevaron al equipo de María Jesús Ocaña Dorantes a solicitar su retiro. No ocurrió.
‘Lexi’, infiltrada en refugio para víctimas: huellas de trata de personas en Yucatán
Con el paso de los días resultó evidente que en realidad la menor fue una infiltrada de una red internacional de trata de personas, cuyos tentáculos se han extendido a Yucatán. Ella, tan parecida a una burbuja: bella, pero también frágil. La representante de Casa Crisal relata:
“El 12 de junio de 2023 la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Yucatán (Prodennay) nos canaliza a la joven. Es recibida en el refugio. Cuando la adolescente entra empezamos la investigación del expediente de la denuncia. Encontramos inconsistencias y divagaciones como respuesta.
“Desde su ingreso empezó a generar problemas de comunicación con el resto de las adolescentes. Hacía comentarios lascivos para cuestionar la comida o actividades. Por ejemplo, nuestro modelo de rehabilitación incluye la arteterapia a través de la música. Se negaba a ejecutar cualquier instrumento. Llegó a decir ‘no puedo tocar la flauta porque me recuerdan los pe… que chupo bien’.
Visitas a víctimas de trata en Yucatán, en la Prodennay
“Solicitamos la baja a Prodennay. Nunca contestaron. En cambio, enviaron un oficio en donde indicaban que tendría una visita con sus supuestos familiares”, agregó.
Las visitas no están permitidas en el refugio. Son las autoridades quienes trasladan a las personas a los encuentros y se realizan en un espacio habilitado por la Prodennay.
Tras la fuga se supo, apunta María Jesús Ocaña Dorantes, que en realidad quienes visitaron a ‘Lexi’ fueron los victimarios que la utilizaban coordinados por un aparente novio, veinteañero, procedente de Tamaulipas, quien estaría ya estableciéndose para operar en el estado de Yucatán.
Sustracción colectiva de Casa Crisal
La fundadora de Casa Crisal indica que el 23 de junio ‘Lexi’ reunió a las adolescentes, que para esa fecha eran 8 en total, para informarles de la salida.
Alertados de lo que pasaría, el refugio, situado en Umán, avisó al 911. Esa noche una patrulla acudió a vigilar las instalaciones. Nada ocurrió y la vigilancia se retiró.
Pero en la noche siguiente, el 24 de junio, a las 22:00 horas ocurrió la rápida sustracción. Empezaron a causar destrozos. Destruyeron las cámaras de seguridad. Contaban con ganzúas como herramienta. El plan era que salieran 6 chicas de 8 que había en las instalaciones.
Sin embargo, cuando observaron que la situación se tornaba cada vez más violenta y el plan de ‘Lexi’ incluía aventar de la planta alta a la Coordinadora de Guardia, tres se negaron a abandonar el refugio, por lo que sólo lograron sustraer a ‘Lexi’ y dos más, tres en total.
Tras el aviso, personal de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) llegó sólo 30 minutos después. A la policía estatal las adolescentes que no se fueron le dijeron que sabían de que se las llevarían a trabajar de prostitutas a la calle 58 de Mérida.
La intervención de la policía de Umán
María Jesús Ocaña Dorantes recuerda que “a las 10:55 viene la policía de aquí, de Umán. Nunca había pasado eso (que lleguen tan tarde). Ellos siempre son quienes reaccionan primero.
“El comandante de guardia me dijo que yo no podía poner una denuncia si no es de acuerdo con Prodennay porque es muy delicado el asunto. Saca una foto y me pregunta si una de esas personas estuvo en el refugio. Le muestro a ‘Lexi’. Con total seguridad me contesta:
“Es una red de trata internacional dirigida por una persona cubana y están instalados en Cancún. No puedes hacer una denuncia tú sola porque si no vas a desactivar todo lo que estamos haciendo para poder desmantelar esa red. Hizo mucho hincapié en que yo no hiciera nada. Así que esperé”.
Aunque dio más detalles al respecto, esto es lo esencial.
Tres menores localizadas
A las 3 de la madrugada el Ayuntamiento de Mérida le avisa que localizaron a las tres jóvenes y las enviarían al refugio. Ocaña Dorantes indica que se negaron a recibirlas porque el protocolo señala que afuera de las instalaciones le corresponde a la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Yucatán.
Quizá como parte de la preparación a las chicas la sustracción planeada se convirtió en una denuncia, una demanda de ellas contra el refugio por supuesto maltrato, falta de respeto a su privacidad y una serie de acusaciones que nunca habían planteado antes de la llegada de ‘Lexi’.
Dijeron que tenían abrasiones recientes; sin embargo, estas ocurrieron en la salida, al treparse por árboles del lugar.
La Prodennay le dice a la fundadora de Casa Crisal que no hay opción: una chica debía regresar al refugio de Umán y luego ser trasladada a Quintana Roo.
María Jesús Ocaña Dorantes refiere: “les digo ¿cómo te voy a recibir a alguien que me demanda? Si me acusa de violentarla no puedo recibirla. La respuesta fue: no hay de otra, recíbela.
“Propuse recibirla muy temprano para llevarla yo misma a Quintana Roo y no tenerla en Casa Crisal. Llegaron hasta las ocho de la noche. Los compañeros de aquel estado me pidieron no viajar a esas horas: es peligroso.
“Ellos vendrían al día siguiente. Así fue. Me dijeron, con sorpresa: hemos visto muchas cosas, pero nada como esto en donde a usted, ahora supuesta victimaria de acuerdo con la denuncia, le asignan nuevamente a la adolescente.
“Así, regresaron a Quintana Roo a una joven que llegó de allá con un perfil delicado: única sobreviviente de una red de narcotráfico en aquél estado, con experiencia muy traumática porque asesinaron a todos los de su grupo, los mataron, con precio a su cabeza, adicta a la piedra”.
Visitas a las víctimas de trata de personas y explotación sexual
El tema de las visitas establecidas por la Prodennay a las víctimas de trata de personas y explotación sexual incide en los hechos descritos.
La presidenta de Casa Crisal dice que la dinámica de sacar a las jóvenes del refugio para encuentros con personas se reanudó sin mucha tardanza, hecho que ella cuestionó:
“Les pregunté las razones para hacerlo. Argumentaron que para evitar una queja en la Codhey (Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán). Les expliqué que el derecho de visita es de las chicas, no de los adultos. Hay casos en que los padres son los agresores. Si un menor dice que no, tengo que respetarlo. A nosotros nos corresponde empoderar a esas niñas”.
María Jesús Ocaña recuerda el caso de una adolescente que en una carta había solicitado que la autoridad ubicara a su hermanita porque estaba en situación de riesgo de calle. Deseaba que también llegara al refugio. En ese caso la agresora era la mamá y era quien pidió visitarla. La joven se negaba a verla.
Ocaña Dorantes preguntó con una de las refugiadas cómo ocurren las visitas: “Me dijo: “hay mucho trabajo. Nos meten en un salón a todos. No hay quien vigile porque somos muchos”. En las visitas ahí hay una oportunidad que facilita el actuar de personas de mala fe”.
Nueva evasión de Casa Crisal, tras visitas
El 21 de julio de 2023 ocurre nueva evasión, un día después de una visita con presuntos familiares, en lo que parece un patrón establecido.
María Jesús Ocaña detalla: “Me pidieron atender una invitación para llevar a las chicas el 21 de julio a una pasadía en la playa. De inmediato dije que para eso no se había solicitado permiso. La respuesta fue que ellos lo habían hecho y a nosotros sólo nos correspondía llevar a las jóvenes.
“Teníamos una actividad ya programada y nos desocupamos pasado el mediodía. Aún así, fuimos. Al pasar el puente de Chelem me mandan la ubicación de la casa en Chuburná. Vi que era una casa con un portón. Se veía segura. Dejé a las chicas y caminé cinco cuadras adelante. No pasó mucho tiempo cuando me hablaron para decirme que una de ellas había escapado.
“Llegó a la playa con su traje de baño, un short, descalza. Junto a la entrada que lleva a la calle había un hombre que le hizo señas con la mano en alto. Ella corrió hacia él. Por más que corrieron detrás no la alcanzaron.
“Había una camioneta con el motor encendido, alguien al volante y otra persona. Así que en ese operativo participaron tres personas para llevársela”.
Esta fue una segunda sustracción que se realizó asociada con las visitas. “Digamos que ya hay una ruta. Saben que hay una vulnerabilidad en los protocolos de Prodennay que les permite acceder a sus víctimas y recuperarlas”.
¿Por qué las redes de explotación sexual se interesan en recapturar víctimas? Porque tienen la voluntad doblegada y al tratarlas como objetos, las consideran “material disponible”. La trata de personas en Yucatán, es un delito que está más cerca de lo que se cree.
Situación actual
El 23 de agosto, Casa Crisal recibe un oficio en donde se informa que las tres adolescentes, aún resguardadas en sus instalaciones, debían acudir a una entrevista individual con personal del equipo multidisciplinario de la Prodennay al día siguiente.
El 24 de agosto, a las 10 de la mañana, tres menores de edad son retiradas del refugio y éste, notificado de que ya no regresarían.
Refugio Casa Crisal y la atención a víctimas
Casa Crisal está especializada en el trabajo exclusivo con sobrevivientes de delitos sexuales en redes de trata, pornografía o prostitución, agresiones familiares o usos y costumbres.
A lo largo de 14 años han atendido a 229 menores de edad víctimas de trata de personas y explotación sexual en Yucatán y 17 en Quintana Roo. Un total de 246 menores que han recibido rehabilitación y reinserción.
Sus instalaciones no suelen ser de fácil acceso ni de conocimiento público. Han trabajado con adolescentes de diversas partes de la República, incluso recibieron una solicitud para atender a dos menores de 17 años de Colombia.
Antecedente de vulneración del refugio
María Jesús Ocaña Dorantes comenta que las menores víctimas suelen ser buscadas por los victimarios: “En otro momento, cuando existía la voluntad de trabajo corresponsable y detectábamos que una adolescente ingresada no cubría el perfil (en clara alusión al caso de ‘Lexi’), enseguida la autoridad actuaba.
“Casa Crisal muchas veces se ha tenido que mover de ubicación porque fue vulnerada la seguridad. En 2009 sufrimos una gran agresión de una red de pornografía. Gente que trabajaba en el gobierno vendió el dato de la ubicación. Entraron, nos golpearon.
“Sin embargo, el gobierno estatal arropó el trabajo que hacemos. Tuvimos la compañía de policía armada y nos vimos obligados a cambiar de ubicación. Así ha ocurrido durante este camino”.
El futuro de Casa Crisal
Las instalaciones de Casa Crisal hoy están vacías, mientras en México la violencia hacia la mujer no se detiene un solo día y acumula más víctimas cada día. ¿Cuál es el futuro de este refugio?
“Me queda claro que esta autoridad no confía en el trabajo de nuestra asociación. A la sociedad le decimos que el Proyecto Crisal continuará trabajando. Por eso debe conocerse la realidad.
“Este lugar, que era el refugio, lo vamos a abrir, a convertir en un centro comunitario para atender a toda la gente mientras hacemos nuestros ahorros para volver a abrir otro refugio en otro lugar, en donde podamos mantener la secrecía.
“Tenemos el trabajo en la comunidad de Poxilá con un modelo que se llama ‘Creando espacios libres de violencia’ y atendemos a 165 familias o 580 personas. Está también la comunidad de Santa Gertrudis Copó. Tenemos el Diplomado para Defensores de los derechos de los niños. Continuamos nuestro camino.
“Las autoridades van y vienen. Es responsabilidad de nosotros como sociedad mantener la salud de nuestros hijos porque no hay ningún precio que valga la dignidad de ellos.
“Refugio Casa Crisal hoy se ve vulnerado ante una falta de seguimiento, delicado y cuidadoso en los protocolos de atención a las niñas sobrevivientes de delitos sexuales.
“Hacemos un llamado a las autoridades que les corresponde conocer de este asunto porque el día 24 de agosto el Estado, a través de la Procuraduría (Prodennay), decidió retirar a las adolescentes que durante 14 años nos estuvieron asignando.
“No nos hicieron daño porque somos una Asociación Civil, pero sí les hicieron daño a las niñas, entonces hago un atento llamado a cuidar cómo están haciendo las cosas. ¿Por qué? Porque estamos dejando de lado lo más valioso que es la infancia y las adolescencias de Yucatán.
¿Recibe subsidio del gobierno el refugio Casa Crisal?
Desde su fundación en 2009 y hasta 2019 refugio Casa Crisal recibía un subsidio de 30 mil pesos mensuales durante todos los meses de cada año, es decir, 360 mil pesos anuales.
A partir de 2020 la subvención se redujo a menos de la tercera parte: 100 mil pesos anuales, en 10 entregas mensuales de 10 mil pesos del mes de marzo a diciembre de cada año.
Para obtenerlo debe participar en un concurso donde se somete a aprobación su propuesta de trabajo durante el mes de enero de cada año y cumplir requisitos que establece, para tal efecto, la convocatoria del Sistema Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Yucatán.
Cada mes de marzo se empieza a hacer efectiva la donación. Diario de Yucatán solicitó su versión de los hechos a la Prodennay, a través de la oficina de Comunicación del DIF Yucatán; sin embargo, hasta el cierre de esta información no se recibía respuesta.
Mañana martes, tres de octubre, haremos una segunda entrega, en la que organismos acreditados, documentan la trata de personas en Yucatán, una entidad que es zona de enganche y tránsito en la modalidad de explotación sexual y prostitución ajena.