Ley de grasas trans: ¿Qué tipo de alimentos y bebidas estarán prohibidos? Esto sabemos

La OPS hizo un llamado para aplicar estas regulaciones a más tardar en 2023, según explica el Gobierno de México.

La ley de grasas trans entró en vigor como parte de la modificación al artículo 216 bis a la Ley General de Salud que se aprobó este año.

En el cual se establece que no podrán contener en su presentación de venta al público aceites parcialmente hidrogenados, conocidos como grasas trans, añadidos durante su elaboración.

La medida se debe a que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) hizo un llamado para aplicar estas regulaciones a más tardar en 2023, según explica el Gobierno de México.

Para saber cuáles son los alimentos que quedarían prohibidos a partir de la entrada en vigor de esta ley, una pista es explicar que el aceite trans se utiliza para elaborar productos horneados, como pasteles, galletas y tartas, palomitas de maíz para microondas, frituras y margarina, entre otros.

¿Cuáles son los alimentos que tienen grasas trans?

De acuerdo con información del Senado de la República, entre los alimentos que incluyen este tipo de grasa están: manteca vegetal, margarina, galletas saladas y dulces, caramelos, frituras, palomitas de microondas, comidas fritas, pasteles y algunos aderezos para ensaladas.

Algunas carnes y lácteos también contienen grasas trans, aunque en pequeñas cantidades. Entre las bebidas están: cafés o tés que tienen crema añadida, la crema batida, leche que tiene aceite de coco o palma, leche entera y bebidas que fueron preparadas a base de helado.

Su consumo se considera peligroso debido a que ‘taponean’ las arterias y así ocasionan problemas a la salud, entre ellos, el colesterol.

Este padecimiento también puede derivar en obesidad y, al mismo tiempo, generar problemas para el corazón o enfermedades como diabetes.

El consumo de dichos alimentos junto con un estilo de vida poco saludable y el sedentarismo son los que propician estos padecimientos, los cuales se buscan evitar por las organizaciones internacionales.

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Fuente: El Financiero