Lluvias exhiben el mal drenaje en Valladolid

Las “lagunas” duran varios días en Valladolid

Las lluvias que se comienzan a regularizar evidencian la falta de un buen drenaje, lo que se refleja en la cantidad de charcos que se forman en las calles y que en algunos puntos hasta parecen lagunas que de alguna manera afectan a los vehículos que circulan en el agua.

El domingo pasado se registró un aguacero alrededor del mediodía que tuvo una duración de poco más de una hora, con lo cual aparecieron “lagunas” en varias calles de la ciudad, incluso en el mero centro, sobre la calle 42 entre 43 y 45 se formó un vado de 100 metros donde se temía que en cualquier momento se quedara varado algún automotor, pero no se reportó algún incidente en el lugar.

En la ciudad hay numerosos pozos perforados en las calles, pero lamentablemente muchos de ellos están obstruidos con sedimento, y hasta el momento se desconoce de algún programa para desazolvarlos

Se ha visto que los trabajadores del departamento de Imagen de la Comuna limpian las zanjas colectoras de las calles, de donde extraen lodo. En cada uno de los canales hay pozos de unas cuatro pulgadas, pero no son suficientes para tener un buen drenaje.

En la calle 39 por el rumbo de Bacalar, se formaban dos lagunas, pero desde hace dos años, solo una se forma, pues en la otra se perforaron nuevos pozos en la pasada administración, lo que permite el flujo más rápido del agua.

Rebasa las banquetas

En el caso del otro charco, cuando llueve, el agua se mete en las casas, debido a que el nivel del agua rebasa la altura de las banquetas, por lo que los vecinos afectados en múltiples ocasiones han pedido que se resuelva ese problema que padecen desde hace muchos años.

El enorme charco se forma en la calle 39 entre 52 y 54 y dura varios días para que el agua se vaya a los pozos que están en el lugar, pero se presume que están obstruidos.

La lluvia que cayó el domingo ocasionó encharcamientos en varias calles como la 42, la 38, entre 49 y 51 en el rumbo de San Juan, en la calle 27 de la colonia Fernando Novelo, en la 28 entre 39 y 41, en la 49 de la colonia San Francisco, solo por mencionar algunos puntos.

Los daños a los vehículos es en el sistema de escape, ya que al estar circulando se calienta, y al entrar a los charcos hace que le salga humo, incluso el silenciador se pica o se rompe, afectando la economía de los propietarios.

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Fuente:  Diario de Yucatán/Juan Antonio Osorio Osorno