“Los pescadores langosteros desanimados por la baja captura de crustáceo y por los bajos precios del kilo han comenzado a dejar poco a poco la captura de la langosta cuya temporada también ha sido mala”, declaró José Luis Carrillo Galáz.
El presidente de la Confederación Mexicana de Sociedades Cooperativas Pesqueras de México, Carrillo Galáz sostuvo que la langosta se comenzó a capturar el primero de julio de 2023 y termina hasta el 28 de febrero de 2024, hasta el momento se han capturado casi 400 toneladas, pero es totalmente insuficiente para el sector social e industrial porque la meta es alcanzar entre 700 y 800 toneladas de la especie.
Puntualizó que desafortunadamente, el precio del kilo de crustáceo se mantiene entre 450 y 500 pesos, muy bajo para el sector social; pero además, el sector industrial no ha podido exportar el alimento a Europa ni a Estados Unidos como en años anteriores y solo se mueve un poco en el mercado nacional, y en la Riviera Maya de Quintana Roo.
Agregó que por lo menos esperan alcanzar 600 toneladas de langosta, quedan dos meses de ésta importante pesquería, aunque ya preocupa a los pescadores del oriente del Estado la baja captación del recurso y los bajos precios del kilo, lo que no es redituable tomando en consideración todo el gasto que representa la captura de la langosta y el riesgo del pescador porque es a través del buceo.
Finalmente, Carrillo Galáz detalló que lo que finaliza en este mes de enero es la captura del mero y de especies de escamas, la captación inició el primero de abril de 2023 y termina el 31 de enero del 2024; a partir del primero de febrero al 31 de marzo éstas especies entran en veda y ven difícil que se llegue a la meta de capturar 6 mil toneladas del mero.
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