Manchester United goleó 4-1 al colista Wolverhampton, en crisis esta temporada, para mantenerse en el grupo de cabeza de la Premier League, este lunes en el cierre de la 15ª jornada.
En una parte alta de la tabla extremadamente apretada, el United, que era 12º antes del inicio del partido, ascendió al sexto lugar (25 puntos), igualado con el Chelsea (5º) y a cinco puntos del podio.
Contra un equipo a la deriva, que no ha conseguido ni una sola victoria desde el inicio del campeonato, los jugadores de Ruben Amorim abrieron el marcador con un gol cómico de Bruno Fernandes, que acertó a pesar de sufrir dos resbalones (25′).
Pero tras varias grandes ocasiones falladas, los Red Devils pecaron de exceso de confianza.
Permitieron que el Wolverhampton levantara la cabeza y empatara justo antes del descanso, gracias al exjugador del Estrasburgo Jean-Ricner Bellegarde, que remató de manera acrobática un centro en el punto de penalti (45’+2). Fue el primer gol de los Wolves en el campeonato desde el 26 de octubre.
Manchester United retomó su seriedad al inicio del segundo tiempo y, tras una buena jugada, Bryan Mbeumo le devolvió la ventaja (51′).
Bellegarde, que debería participar en la Copa del Mundo el próximo año con el sorprendente equipo de Haití, se lesionó y tuvo que abandonar el campo cojeando. Su equipo se desmoronó.
Mason Mount, bien asistido por Bruno Fernandes, amplió la ventaja (62′), y el portugués culminó su gran noche con un último gol de penal (82′), bajo la mirada desesperada del público del Molineux Stadium.
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Fuente: Adrenalina