Como resultado, más de tres mil pescadores se han visto forzados a detener operaciones, justo cuando inicia la temporada de captura de pulpo, una de las especies más valoradas en la región.
Enrique Sánchez Sánchez, titular de la Cámara Nacional de las Industrias Pesquera y Acuícola (Canainpesca) en la entidad, informó que la veda temporal afecta a comunidades pesqueras de Sisal, Chuburná, Chicxulub y Progreso, impactando a más del 21% de los trabajadores registrados en el padrón pesquero.
Este paro afecta indirectamente a más de 20 mil familias que dependen de la pesca. Aunque se estima que el fenómeno natural podría durar aproximadamente dos semanas, los líderes del sector reconocen que esta interrupción podría comprometer los objetivos anuales de captura, estimados en 29 mil toneladas de pulpo, cifra similar a la de la temporada pasada.
Pese a la situación, la flota de mediana altura —compuesta por cerca de 400 embarcaciones— continúa operando en el oriente del estado, lo cual mantiene en movimiento parte de la cadena productiva, aunque con una capacidad reducida.
Garantizan calidad de los productos del mar
Frente a la incertidumbre generada por la marea roja, líderes del sector aseguraron que los productos marinos que están llegando al mercado son completamente seguros para el consumo.
Sánchez Sánchez subrayó que tanto el pulpo como otros pescados que ingresan a las plantas procesadoras cumplen con rigurosos estándares de calidad e inocuidad. Por su parte, José Luis Carrillo Galaz, presidente de la Confederación Mexicana de Cooperativas Pesqueras y Acuícolas, llamó a la calma y aclaró que en Yucatán no existen especies filtradoras como ostiones o almejas, las cuales sí podrían representar un riesgo por acumular toxinas.
“El fenómeno aquí no es tóxico para los humanos; su impacto es en el ecosistema marino debido a la disminución del oxígeno en el agua. No se han registrado casos de intoxicación en más de 20 años”, afirmó Carrillo Galaz.
Ambos dirigentes pidieron a la población confiar en la calidad de los productos del mar yucatecos y evitar caer en desinformación.
Repercusiones económicas más allá del mar
El efecto de la marea roja no se limita al sector pesquero. Comercios relacionados con la venta y preparación de mariscos también han comenzado a experimentar una baja significativa en sus ingresos.
Una encuesta realizada por la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida (Canaco Servytur) reveló que el 30% de los negocios del estado, especialmente aquellos ubicados en la zona costera, han reportado impactos negativos. José Enrique Molina Casares, presidente del organismo, señaló que la disminución en las ventas ya es notoria y podría extenderse por lo menos dos semanas más.
El impacto se extiende a sectores clave como el turismo, la hotelería y el comercio formal, todos dependientes en gran medida de la gastronomía local basada en productos del mar.
Ante esta situación, la Canaco busca establecer alianzas con la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) para monitorear el comportamiento del mercado y generar estrategias que ayuden a mitigar las pérdidas, protegiendo tanto a empresarios como a consumidores.
Molina Casares reiteró que los pescados y mariscos que se venden en establecimientos regulados no representan riesgo para la salud, ya que cumplen con todos los protocolos de inocuidad y trazabilidad. Sin embargo, advirtió que una prolongación del fenómeno podría ocasionar que más negocios se vean afectados, convirtiendo al verano de 2025 en uno de los periodos con menor actividad económica de los últimos años.
Redacción: Yucatánalamano.
