Medio Progreso, sin electricidad: negocios reportan pérdidas económicas
Ayer martes, los progreseños sufrieron durante varias horas debido a la falta de energía eléctrica ocasionada por un apagón generalizado que afectó prácticamente media ciudad.
Los primeros reportes de los apagones se registraron desde poco antes de las 11 de la mañana, hecho que comenzó a hacerse viral en redes sociales, pues poco a poco los progreseños se percataron del enorme territorio que se había quedado sin suministro eléctrico.
Ayer martes, los progreseños sufrieron durante varias horas debido a la falta de energía eléctrica ocasionada por un apagón generalizado que afectó prácticamente media ciudad.
Los primeros reportes de los apagones se registraron desde poco antes de las 11 de la mañana, hecho que comenzó a hacerse viral en redes sociales, pues poco a poco los progreseños se percataron del enorme territorio que se había quedado sin suministro eléctrico.
De acuerdo con los reportes de los vecinos, la afectación dividió al puerto prácticamente por la mitad, pues no había energía eléctrica desde la calle 78 en toda su extensión de Norte a Sur, es decir, desde el periférico hasta el malecón, y se extendió hasta la zona del puerto de abrigo de Yucalpetén, a la altura de la calle 150.
¿Qué causó el apagón en Progreso?
De hecho, a lo largo de la tarde se pudo ver a personal de la CFE que trabajaba en distintos puntos, partiendo de la calle 86 hasta abarcar zonas como la colonia Ciénega 2000 y otras calles que rodeaban la mencionada vía.
Según se pudo averiguar, la Comisión cortó el suministro debido a trabajos de mantenimiento en la red eléctrica y se esperaba la reposición de la electricidad a eso de las 5 de la tarde, lo que se retrasó en algunas zonas.
Pierden ventas por apagón
Media ciudad padeció ayer los contratiempos de la suspensión de la energía eléctrica, y las afectaciones fueron principalmente en los hogares de los progreseños, pues temían que se hayan dañado sus aparatos eléctricos, o bien, dado el desconocimiento de cuánto tardaría la suspensión, que sus víveres refrigerados se echaran a perder.
En el centro de la ciudad, la señora Lucía Soberanis comentó que estaba molesta porque “no avisan, si lo hicieran pues uno se puede preparar, apaga sus cosas, las desconecta, pero no avisan; mientras, que tal si se echa a perder mi refri ¿dónde guardo mi lomo que voy a cenar en Navidad?”, dijo al indicar que ya había hecho dicha compra y la mantiene refrigerada esperando el día para cocinarlo.
En el caso de los negocios, la afectación fue mayor por el lado de la cobranza, pues muchos negocios que cobran a través de puntos de venta electrónicos con uso de computadoras y terminales para tarjetas de crédito o débito no podían aceptar este tipo de pago, por lo que terminaban perdiendo las ventas de las personas que no llevaban efectivo con ellas para poder realizar sus respectivas compras, teniendo en cuenta, que cada día aumenta el flujo de personas que recorren las calles de Progreso buscando diversos artículos para comprar.
Dada la situación, los negocios que quedaron en desventaja fueron aquellos que no contaban con plantas generadoras para abastecerse mientras no había electricidad, pues los que sí las tenían no dudaron en ponerlas a trabajar y de esta manera poder minimizar las afectaciones causadas por este corte inesperado.
Afectaciones viales por falta de energía eléctrica en Progreso
Por otro lado, la Policía Municipal tuvo que entrar al “quite” en las diversas esquinas del centro de la ciudad que cuentan con semáforos, pues estos quedaron prácticamente inservibles lo que complicaba la circulación, debido a la alta afluencia de vehículos, típica de la temporada vacacional en el puerto de Progreso.
Aunque se esperaba que el restablecimiento de la energía fuera de manera generalizada, tal y como fue el corte, el regreso de ésta fue escalonada, pues poco a poco diversos sectores de la ciudad fueron recuperando el servicio y el puerto fue regresando a la normalidad, aunque pasándose del tiempo previsto que era a las 5 de la tarde.
Nota original aquí
Fuente: Diario de Yucatán