Autoridades afirman que los predios abandonados se han vuelto un problema sin control.
En Mérida el 80 por ciento de los predios que se reportan por basura y maleza son baldíos, informó el director de Gobernación del Ayuntamiento, Ignacio Gutiérrez Solís, quien dijo que es muy difícil tener un control de todos los terrenos que se encuentran en esta situación, pues actualmente son más de 600 mil en la ciudad.
Dijo que los ciudadanos juegan un papel importante en este tema, pues ante el reporte de algún sitio así el municipio acude a realizar una limpieza, sin embargo, se tienen complicaciones con aquellos a donde no se puede acceder, debido a que no logran contactar a los propietarios, se encuentra en medio de una situación jurídica, ya sea por estar embargado, en un proceso de hipoteca o incluso intestado.
“En estos predios no se puede intervenir pues son propiedad privada y no se pueden ejercer recursos públicos sobre ellos”, explicó el funcionario municipal.
Dijo que actualmente se tiene un sistema de conciliación con los dueños de aquellos lugares que se encuentran en situación de abandono para que los limpien y cumplan con el Reglamento de Conservación de Bienes Inmuebles, y los resultados siempre son positivos.
Gutiérrez Solís dijo que las multas que se ejercen por esta faltan van desde los dos mil 500 hasta los 50 mil pesos en casos ordinarios, pero en caso de reincidencia podría calificarse como un agravante y la multa puede ir más allá de los 50 mil.
Apuntó que en esta temporada de calor e incendios, personal de Protección Civil del Ayuntamiento de Mérida trabaja de cara a un protocolo implementado para monitorear la ciudad trabaja las 24 horas del día, incluso con rondines y por medio del cual se han atendido algunos siniestros menores.
“Han ocurrido incendios muy pequeños y focalizados, los cuales se atienden y extinguen sin mayor problema por el cuerpo de bomberos”, explicó.
Recordó que la labor de Protección Civil Municipal es la de atender el llamado de la ciudadanía y activar los protocolos de aviso al cuerpo de bomberos y la Coordinación Estatal de Protección Civil.
Fuente: Novedades Yucatán/Grisel Chan