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Por Alejandra Parra.
Como ya es tradición, en los cementerios de Mérida se realizaron varias ceremonias religiosas, para que los fieles puedan conmemorar la llegada de las almas de sus difuntos, y rezar por su eterno descanso.
En el cementerio de Xoclán, desde muy temprano comenzaron a llegar los familiares de los difuntos, quienes con flores y ofrendas recordaron la memoria de quienes se adelantaron.
El sacerdote Oscar Viñas, vicario episcopal para la vida consagrada llamó a los ciudadanos a hacer reflexión de estos días, que es sabido son muy emotivos para los meridanos.
