Comerciantes de los mercados Lucas de Gálvez y San Benito afirman que, aun con Cuaresma, en esta ocasión la gente prefiere cuidar su economía
«Primero el bolsillo», al menos ese parece el principio de los clientes que acuden en esta temporada de Cuaresma a comprar en los mercados Lucas de Gálvez y San Benito, del centro de Mérida.
“La economía no ayuda, hay que comer lo que haya”, comentó Aiza Solís Carrillo, empleada de la pollería San Manuelito, en el Lucas de Gálvez.
“Ahí vamos, hay un poco de venta, me imagino que la gente consume mucha verdura y pescado porque ha estado baja la venta (de pollo)”, añadió.
“Por aquí ha estado vacío el mercado los viernes, entre semana está normal (la venta)”.
Locatarios de varias zonas de ambos mercados coincidieron en que, al hacer un comparativo con años anteriores, en esta ocasión no se han respetado del todo los días de vigilia, en los que no se deben comer carnes rojas.
Por precio, compran carne roja incluso en Cuaresma
“En estos tiempos ya no se respeta mucho la vigilia”, expresó Josué Acosta Camal, de la pescadería “Costa Azul”.
“Quienes lo respetaban antes eran los abuelitos, las mamás, las jefas de familia que están más cercanas a la religión”.
Una parte de la explicación sería el alza de precios de productos de la canasta básica, principalmente de los que se consumen en esta época, como el huevo.
“La gente nos ha dicho que prefiere comprar un kilo de carne a 100 pesos que un kilo de huevo a $80″.
«‘Por 20 pesos mejor me compro un kilo de carne’”, expresó José Ruelas, trabajador de la carnicería “El Chino”.
Sin embargo, las ventas en el área de carnes también son bajas los viernes de Cuaresma en comparación con el resto de la semana.
Venta de pescado en viernes de Cuaresma en mercados de Mérida
En el caso de los pescados y mariscos la situación es al revés, en algunos negocios sí aumentaron las ventas los viernes de esta temporada.
“Mi clientela es la que está viniendo, nos ha ido mejor en esta temporada y más los viernes, sobre todo en mi caso que ya metí más pescados, como el pejelagarto a $160 el kilo; el salmón a $360 el kilo y el medallón de atún a $250 el kilo”, comentó Javier Camal, dueño de la pescadería Sosa.
“Está muy baja la venta a pesar de ser Cuaresma, a lo mejor por los precios».
Por ejemplo, añadió, la posta frita está a $230 el kilo y el pechito a $220; la gente no lo paga, si acaso se llevan de a medio kilo, que son $110 o $115 pesos.
«Entre semana está peor, no hay venta”, manifestó Ileana Dzul, empleada de la pescadería “La Picuda”.
¿Qué especie de pescado tiene mayor demanda?
En el área de pescados del mercado Lucas de Gálvez, la especie más solicitada es el mero, pero como está en veda la gente compra tilapia a $120 el kilo; la rubia a $100 el kilo y el guachinango a $140 el kilo, aunque también el cazón, a $90 el kilo, de acuerdo con vendedores.
En el área de carnes del mercado San Benito lo que más se vende los viernes de Cuaresma es la pechuga de pollo, a $70 el kilo, y el muslo y filete, a $50 el kilo.
En el caso del puerco, el kilo de polomo rejalado cuesta $100 el kilo, y el de costillas para asar, $110. El kilo de bistec de res cuesta $160 y el de chocolomo con recados y huesos, $150.
Locatarios de ambos mercados del centro de Mérida esperan que no se afecten más sus ventas cuando comiencen las vacaciones escolares de Semana Santa y Pascua.
Fuentes: Diario de Yucatán.