Pancreatitis: ¿Qué es y qué alimentos ‘detonan’ esta enfermedad?
La pancreatitis aguda es más frecuente entre las personas de 40 y 50 años de edad.
Año con año, millones de personas alrededor del mundo son diagnosticadas con pancreatitis. Famosos como Phil Collins y Travis Barker han padecido esta enfermedad, que normalmente es ocasionada por el consumo exagerado y prolongado de alcohol; así como malos hábitos alimenticios.
Pancreatitis es el término utilizado para describir la inflamación del páncreas, un órgano ubicado en el abdomen que mide entre 12 a 15 centímetros de longitud y que tiene funciones digestivas y hormonales.
Cuando la inflamación del páncreas se produce de forma repentina; es decir, de forma aguda, estamos ante una pancreatitis aguda. Cuando la inflamación es recurrente y hay signos de daño persistente en el páncreas, lo llamamos pancreatitis crónica.
¿Cuáles son los síntomas de la pancreatitis?
El síntoma principal de la pancreatitis es el dolor en el estómago que se corre hacia la espalda y hombro izquierdo; se acompaña por náuseas, vómito persistente y en ocasiones hasta fiebre.
- Dolor intenso en abdomen superior “arriba del ombligo”.
- El dolor se acompaña de náuseas, vómito persistente y en ocasiones fiebre.
- Síntomas de deshidratación severa, como son: confusión mental, piel seca y caliente, latidos cardiacos aumentados, respiración rápida y superficial, presión arterial baja, poca producción de orina.
- Puede presentarse coloración amarillenta de conjuntivas y piel, así como orina muy oscura en caso de que la pancreatitis sea provocada por cálculos biliares.
¿Cómo prevenir la pancreatitis?
De acuerdo al IMSS, el mejor tratamiento contra la pancreatitis aguda es la prevención, por lo que se recomienda disminuir o eliminar el consumo de alcohol y alimentos ricos en grasas.
Existen factores de riesgo con los que se debe tener especial cuidado, como son:]
- El sobrepeso y la obesidad.
- El consumo de alcohol y alimentos ricos en grasas.
- Padecer de cálculos en la vesícula y vías biliares.
- Tener niveles de triglicéridos muy elevados en suero (mayor o igual a 1000mg/dl).
- Diabetes.
- Antecedentes familiares de pancreatitis.
Con información del IMSS, NIDDK y Mayo Clinic.
Fuente: El Financiero