La turbosina representó el 45% de los costos operativos de Aeroméxico y 51% de los de Volaris en el 2T22. Las firmas trasladaron ese impacto a los precios de las rutas más populares.
La invasión de Rusia a Ucrania trajo aumentos en los precios de los combustibles, una situación que afectó a las aerolíneas nacionales, poniendo en riesgo la esperada recuperación del sector para este año.
En el segundo trimestre del año, las líneas aéreas del país que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) reportaron que los costos de la turbosina aumentaron más del 100 por ciento, lo que golpeó sus balances financieros y a sus previsiones en ingresos y utilidades para este año.
Aeroméxico reportó un alza de 109 por ciento durante dicho lapso del año en el precio de la trubosina. La aerolínea dirigida por Andrés Conesa pasó de adquirir el litro de combustible en 10.5 pesos, en promedio, en el segundo trimestre del año pasado, a comprarlo en 22.1 pesos por litro, esto en el mismo periodo de 2022.
De esta manera, el costo total del combustible, para abril-junio, fue de 8 mil 531 millones de pesos, un aumento del 204 por ciento.
Con ello, el precio del combustible representó el 45 por ciento de los costos totales de operación de la empresa, una proporción alta, pues en la aviación mexicana, la turbosina equivale a alrededor del 30 por ciento del costo operativo de una aerolínea.
Estos resultados, sumados a un mayor costo de financiamiento, llevaron a la firma a tener una pérdida neta de 947.9 millones de pesos en el segundo trimestre.
Pese a ello, Monex Casa de Bolsa estimó que el balance de la empresa fue neutral, pues si bien tuvo un mayor nivel de flujo operativo al estimado, Aeroméxico registró una caída en su margen EBITDA, producto del aumento de la turbosina.
Ante las fluctuaciones de los combustibles, René Armas Maes, vicepresidente comercial y consultor aeronáutico, indicó que “hay una serie de iniciativas que las aerolíneas deberían implementar para mitigar su impacto desde la elección de la flota, la cobertura de combustible y los recargos por combustible hasta el aumento factores de carga y estricto control de capacidad”.
Las líneas aéreas han compensado el aumento de la turbosina con tarifas más altas que, hasta ahora, no han impactado la demanda de pasaje aéreo en el país.
Volaris reportó un fuerte incremento en el precio promedio del combustible: mientras que en el segundo trimestre del 2021, el galón económico de turbosina rondaba los 2.13 dólares, para el mismo periodo, pero de este año, el precio ascendió a 4.39 dólares. En ese sentido, el aumento en solo un año fue de 106.5 por ciento.
Así, los gastos operativos totales del trimestre para Volaris fueron de 710 millones de dólares, un alza del 61 por ciento, el cual se explica por el incremento en el costo del combustible.
En conferencia con analistas, el vicepresidente Ejecutivo Comercial y Operaciones de la aerolínea, Holger Blankenstein, dijo que el aumento en los precios del combustible es temporal y el plan de Volaris es continuar estimulando la demanda para compensar la fluctuación en los precios del combustible.
Suben 24% los boletos
En el último año aumentaron en promedio en 24 por ciento los precios para las 10 principales rutas en las que viajan los mexicanos, esto según información del Monitor del Estado de la Actividad Aérea (Monitoreaa) del Instituto Mexicano del Transporte.
El viaje redondo pasó de costar 3 mil 115 pesos, a poco más de 2 mil 877 pesos, esto contemplando información de los precios disponibles para los destinos de México a Cancún, Monterrey, Guadalajara, Tijuana, Mérida, Tuxtla Gutiérrez, Villahermosa y Puerto Vallarta; así como para los viajes de Guadalajara-Tijuana y Cancún-Monterrey.
En cuanto a las rutas internacionales, el alza en las principales para los mexicanos, el aumento promedio es de 14.4 por ciento, al alcanzar, durante mayo de este año, un costo de 6 mil 102 pesos.
La ruta internacional con mayor demanda es la de México-Los Ángeles, seguida de Guadalajara al mismo destino y Cancún-Dallas, todas en el mercado aéreo estadounidense.
Fuente: El Financiero