Con los frecuentes nortes y los cierres de la navegación, la actividad pesquera en la costa oriente se paralizó desde el pasado mes de diciembre, por lo que con la dispersión de apoyos de los tres niveles de gobierno comienzan a tener un respiro en su economía.
Una de las temporadas que más pesan en la pesquería después de la del pulpo, es la del mero, que entró en veda apenas la semana pasada y termina el 31 de marzo.
Por ello se han comenzado a dar los vales canjeables en los tres puertos del oriente que son parte del programa “Respeto la Veda del Mero” del gobierno estatal.
A cambio de los vales por un monto de 4,800 pesos, los hombres de mar tienen que cumplir con “fajinas” que formar parte del empleo temporal.
Apenas el miércoles le tocó a los puertos de Río Lagartos y San Felipe, mientras que ayer fue a los pescadores de El Cuyo.
Beneficiados
Dicho programa no solo beneficia a los pescadores y a sus familias, sino también a las mismas comunidades pues después del frente frío que azotó a la península, los puertos de abrigo, malecones y calles terminaron sucios.
En San Felipe y Río Lagartos se hicieron labores de limpieza de manera general pues se recordará que el agua no solo ingresó a sus calles al subir al nivel del mar, sino también a las viviendas.
Lo mismo ocurrió en el puerto de El Cuyo donde ayer más de 200 hombres de mar comenzaron a realizar limpieza en el puerto de abrigo y en las calles de la comisaría.
En esa comunidad hay pescadores que no están en el padrón del programa de la Veda del Mero, sin embargo, el ayuntamiento de Tizimín otorgó dos paquetes de despensas a más de 200 personas aproximadamente.
La gente que realizó la limpieza se concentró en la dársena donde incluso las autoridades llevaron un “ bobcat” para facilitar los trabajos.
Por otra parte, el gobierno federal comenzará a partir de la otra semana la dispersión de apoyos económicos a pescadores con un monto de poco más de 7 mil pesos como parte del programa “Bienpesca”.— WENDY UCÁN CHAN
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Fuente: Diario de Yucatán