Red eléctrica con “estrés”: seguirán los apagones en la Península

Aunque es impensable, la red eléctrica de la CFE sufre estrés ante tanta demanda de suministro para la mitigación del calor extremo que prevalece en Yucatán.

Y una de sus principales “terapias” para evitar un colapso mayor del sistema estatal, regional y nacional son los cortes de luz programados o los molestos apagones que ocurren en automático.

De acuerdo con el doctor en ciencias materiales aplicadas a la energía, Rubén Domínguez Maldonado, profesor-investigador de la Universidad Anáhuac Mayab, hay un “tratamiento” largo para aminorar ese estrés eléctrico: la conciencia energética.

Esto significa el ahorro de energía en cada casa, negocio, industria u oficina pública, mientras llega la solución definitiva con la entrada en funcionamiento de las dos nuevas plantas de generación de electricidad de ciclo combinado que se construyen en Mérida y Valladolid.

De lo que no tiene duda el doctor Domínguez Maldonado es que este calor extremo que prevalece en la Península, en México y el planeta Tierra es derivado del cambio climático.

Tampoco tiene duda que esta misma ola de calor extremo afecte el servicio de electricidad porque hay alta demanda de energía para mitigar este fenómeno climático, lo que rebasa la producción en esta región de México.

Por tanto, expuso, es inevitable que surjan constantes apagones y cortes del suministro de electricidad en las ciudades para evitar algún colapso mayor que cause incontrolable molestia social y empresarial.

“Las olas de calor que sentimos son derivadas del cambio climático que hay en el planeta por la contaminación y otras acciones negativas del hombre en la tierra”, explicó durante una entrevista sobre el problema social que ocasiona la sobredemanda de energía.

“Las altas temperaturas provocan que se intensifique el calor, que las personas usen más los equipos de aires acondicionados y los ventiladores, lo que provoca un mayor consumo energético que estresa las líneas eléctricas de la red de la CFE”.

El experto reconoció que Yucatán tiene un déficit en generación de electricidad. No se puede cubrir el alto consumo de energía en las temporadas de calor en los tres estados de la Península. Incluso, la CFE tiene que transferir cierta cantidad de energía de las plantas de Tabasco, Chiapas y Oaxaca para cubrir la demanda peninsular.

Sin embargo, parece que este problema del déficit energético llegará a su fin en enero de 2025, cuando entren en operación las dos nuevas plantas de generación de electricidad que están en construcción en Mérida y Valladolid.

“La producción de casi 1,500 megawatts (MW) de energía con estas dos plantas debe cubrir de manera suficiente la demanda actual y hasta habrá un excedente”, consideró el doctor Domínguez Maldonado.

“Esta producción adicional de electricidad debe cubrir la demanda de los próximos 15 a 20 años, aún si la entidad sigue con su crecimiento poblacional, comercial, industrial y habitacional”.

De acuerdo con datos que proporcionó, el Sistema Eléctrico Nacional tiene un límite de reserva del 6% para cubrir la demanda energética en el país. En esta condición el estado del sistema se comporta de manera natural.

Cuando la demanda energética en el país provoca que el límite de reserva se reduzca a un 3%, entonces el Sistema Eléctrico Nacional entra en estado operativo de alerta.

Datos actualizados del Cenace señalan que el país tiene una demanda bruta actual de 46,326 MW y para el día 10 de mayo pasado, a las 14:36 horas, la demanda actual neta fue de 44,998 MW. Incluso, se espera una demanda máxima pronosticada de 47,377 MW ante la ola de calor que azota al territorio nacional.

En el caso particular de la región peninsular, hay una generación neta de alrededor de 2,231 MW con un intercambio neto de 213 MW entre la región peninsular y la región Oriental para cubrir la demanda neta de 2,231 MW, según la información revisada del 10 de mayo de 2024, a las 10 horas.

Lo ideal en el Sistema Eléctrico Nacional es que tenga límite mayor de reserva al 6% que permita tener un mayor margen de maniobra energética para cubrir la demanda neta de consumo debido a las olas de calor.

¿Por qué ocurren los apagones?, preguntó el reportero del Diario.

“Estos apagones, en gran medida, son por la mayor demanda de energía en comercios, industrias y casa habitación y la generación eléctrica es la misma”.

“Este desbalance hace que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) realice cortes programados en ciertas zonas para desestresar las líneas eléctricas y evitar un daño mayor a la red y transformadores”.

“Si no hace esos cortes de luz, los resultados serían más costosos que los apagones porque dañarían líneas, transformadores y otra infraestructura, lo que haría más costosao y tardada la reparación, y eso causaría mayor molestia entre los usuarios”, explicó.

Fuente: Diario de Yucatán