Las autoridades implementaron medidas en la playa de Progreso, tras registrar más de 50 ataques de medusas desde el domingo pasado
La salida de decenas de medusas a la orilla de la playa obligó a las autoridades a decretar restricciones a fin de que no haya más lesionados, pues solamente del pasado domingo al martes de “batalla de flores”, se contabilizaron más de cincuenta afectados por picaduras de esta especie.
Justo durante el día de antier había incluso banderas rojas en varias partes de la playa adjunta al malecón tradicional, aunque al final la gente hizo caso omiso, pues se metían al mar sin importar el peligro que conllevaba darse un baño en las condiciones que advertían las autoridades.
Ayer miércoles, a pesar de que se contemplaba una asistencia menor con apenas cinco mil personas dentro del malecón, persistió la autoridad otorgando rondas de vigilancia, pues aunque ya no estaban presentes las señales de peligro, si se advirtió a los bañistas sobre las condiciones.
“La gente puede entrar a la playa, pero bajo su propio riesgo, honestamente hemos hecho hasta lo imposible para hacerles ver que no está acondicionada el agua de este sector, pero la mayoría de la gente no hace caso, opta por meterse al mar” especificó un agente ecológico situado junto al “museo del meteorito”.
Efectivamente, en un recorrido que se realizó por esta zona, la mayoría de las familias visitantes permanecían en el mar, siendo una sorpresa cuando se les cuestionaba por la presencia de estas especies que desde el seis de febrero han sido vistas tanto en la orilla del mar como entre los bañistas.
“No sabíamos absolutamente nada, creo que se necesita mayor información de esta situación porque cuando llegamos al puerto la gente hasta nos dijo que no había nada extraño, ya que les preguntamos las razones de porque había tanta policía en la zona de arena, supongo no nos dijeron sobre esto para que accediéramos a pagar una palapa” exclamó Josefina Ortiz.
Cuando se le cuestionó a trabajadores de esta área si habían ofrecido información relativa al problema, se indicó que no, pues esto era obligación de las autoridades. También se informó que persiste el temor de que las vacaciones de Semana Santa se vean afectadas por las medusas, como ocurrió con los días de verano del año pasado y varias mantarrayas que huían del manchón de marea roja que se presentó en aquella época.
“Si nos perdemos la Semana Mayor vamos a volver a perder lo que ya generamos en Carnaval, la verdad es que no estamos en contra de la salud de nadie, pero también es cierto que tenemos que mantener a flote nuestras ganancias, nosotros solo cumplimos con ofrecer lo que vende el lugar para el que trabajamos”, expuso Fernando Correa.
Precisamente, el puesto de vigilancia donde se concentraron durante el carnaval, paramédicos y policías de distintas dependencias, también tuvo algunos elementos esperando acudir al llamado de auxilio; sin embargo, al menos hasta las 15:00 horas, no hubo casos extremos, salvo el de dos adolescentes de 16 y 18 años de edad, aunque fueron al hospital por cuenta propia.
En consulta con la Cruz Roja, delegación Progreso, el domingo hubo cerca de 30 afectados. Entre lunes y martes 25, mientras que el número descendió para ayer miércoles. Hasta ahora destaca que no ha habido algún plan con base a esta situación por parte de las autoridades como la misma Policía Ecológica o alguna dependencia en materia de seguridad.
Fuentes: Por Esto.