¿Rusia terminará la guerra en Ucrania? Putin revela al G20 que piensa cómo detener la ‘tragedia’
‘Las acciones militares son siempre una tragedia para personas y familias concretas’, admitió Vladimir Putin.
El presidente ruso, Vladímir Putin, admitió que “hay que pensar en cómo detener esta tragedia”, en alusión a la guerra en Ucrania durante su intervención en la cumbre virtual de líderes del G20.
“Por supuesto, las acciones militares son siempre una tragedia para personas y familias concretas, y para el país en general. Sin lugar a dudas, hay que pensar en cómo detener esta tragedia”, dijo Putin durante una intervención transmitida por la televisión pública, al tiempo que añadió que Rusia “nunca” se ha negado a entablar negociaciones de paz con Kiev.
Putin recordó que fue el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien prohibió por decreto dialogar con Rusia para poner fin a la contienda que Moscú inició en febrero de 2022.
Además, aludió a los colegas que se mostraron “conmocionados” con las consecuencias de la “agresión” rusa contra el país vecino.
Putin no había ido a las últimas tres cumbres del G20
“Entiendo que la guerra, la muerte de personas, no puede no conmover. ¿Y el golpe sangriento en Ucrania en 2014 que desembocó en la guerra del régimen de Kiev contra su propio pueblo en el Donbás? ¿Eso no conmueve?”, dijo.
Añadió: “Y el exterminio de la población civil en Palestina, en la Franja de Gaza, ¿no impresiona? Y el hecho de que médicos tengan que operar a niños (…), utilizar escalpelos en cuerpos de niños sin anestesia, ¿no impacta?”.
“Y que el secretario general de la ONU diga que Gaza se ha convertido en un gran cementerio infantil, ¿no conmueve?”, resaltó.
Putin no acudió a las últimas tres cumbres del G20 en Italia, Indonesia y en septiembre pasado en la India. En esta última fue representado por el ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov.
La invasión de Ucrania por parte de Rusia ha estado en el foco del G20 durante los últimos años, llegando a entorpecer la adopción de comunicados conjuntos y obligando a intensas negociaciones sobre el lenguaje, como sucedió en la última cumbre de líderes.
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Fuente: El Financiero