Ser vegetariano estaría en el ADN
El vegetarianismo es una opción que, al menos en parte, puede estar en nuestros genes, según un estudio que identificó 34 de ellos potencialmente implicados en mayor o menor medida en la decisión de las personas de no consumir alimentos cárnicos.
Una investigación que publica “Plos One”, dirigida por la Universidad Northwestern, analizó el genoma de 5,324 vegetarianos estrictos y de 329,455 que no lo eran para identificar variaciones genéticas que podrían relacionarse con ser vegetariano.
El estudio identificó tres genes “significativamente asociados con el vegetarianismo y otros 31 potencialmente asociados”.
Varios de éstos, incluidos dos de los tres principales, están implicados en el metabolismo de los lípidos y/o en la función cerebral, de acuerdo con el estudio.
Este resultado plantea la posibilidad de que las diferencias en la forma en que el organismo procesa los lípidos y los efectos resultantes en el cerebro puedan subyacer en la capacidad y la elección de una dieta vegetariana.
Uno de los aspectos en los que los productos vegetales difieren de la carne son los lípidos complejos, señaló el autor principal del trabajo, Nabeel Yaseen, citado por la Universidad Northwestern.
El científico cree que puede haber componentes lipídicos presentes en la carne que algunas personas necesitan y agregó que sería posible que “las personas cuya genética favorece el vegetarianismo sean capaces de sintetizar estos componentes de forma endógena”. Sin embargo, “en este momento esto es mera especulación y hay que trabajar mucho más para comprender la fisiología del vegetarianismo”, advirtió.
Por eso, el equipo señala que se necesita más investigación sobre las posibles diferencias entre la síntesis de lípidos y el metabolismo en vegetarianos y no vegetarianos, así como otras vías fisiológicas que podrían subyacer al vegetarianismo.
El factor determinante de las preferencias alimentarias no es solo el sabor, sino también cómo lo metaboliza el organismo.
Además, aunque las consideraciones religiosas y morales “desempeñan, sin duda, un papel importante” en la motivación para adoptar una dieta vegetariana, los datos del estudio sugieren que la ”capacidad de adherirse” a ella “está limitada por la genética”, afirmó.
Espera que futuros estudios arrojen más luz sobre las diferencias fisiológicas entre vegetarianos y no vegetarianos, lo que permitiría ofrecer recomendaciones dietéticas personalizadas y producir mejores sustitutos de la carne.
Sin carneDetalles
Una amplia investigación descubrió tres genes asociados al vegetarianismo.
Más investigación
Científicos señalan que faltan más estudios de las diferencias entre la síntesis de lípidos y el metabolismo de vegetarianos y no vegetarianos.
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Fuente: Diario de Yucatán