La madrugada del miércoles 14 de mayo, un violento enfrentamiento en el fraccionamiento Villas del Sol dejó como saldo dos personas muertas: un policía y el agresor.
El caso se complicó más tarde, cuando el civil fue identificado como un sicario vinculado a un grupo delictivo que opera en la región.
Todo comenzó con una denuncia por violencia familiar en el cruce de las avenidas Azulejos y Costureros.
Dispara contra policías en Villas del Sol
Al llegar al sitio, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana observaron a una pareja que, junto con una menor, intentaba huir en motocicleta.
Entonces los policías iniciaron una persecución por calles del fraccionamiento, pero al llegar a la avenida de las Cigüeñas la motocicleta derrapó.
En ese momento el sujeto, identificado como Magdaleno “N”, de 30 años y originario de Tabasco, sacó un arma y disparó contra los agentes, hiriendo de gravedad a Juan Pablo Torres de la Cruz, quien cayó al suelo.
Minutos después llegaron refuerzos de la Policía Estatal, quienes también fueron atacados por el agresor.
Los policías repelieron la agresión y abatieron al sujeto en el lugar. Aunque servicios médicos acudieron de inmediato, confirmaron que tanto el policía como el atacante ya no contaban con signos vitales.
Sicario, el asesino del policía en Playa del Carmen
Inicialmente, el caso se trató como un hecho de violencia familiar con desenlace fatal. Sin embargo, las investigaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) revelaron que Magdaleno no era un civil armado cualquiera, sino presunto integrante de una célula delictiva ligada a “El Galletas”, uno de los generadores de violencia más activos en Tulum y zonas de invasión en Playa del Carmen.
Como parte de la acción policiaca, fue detenida Asunción “N”, esposa del agresor, mientras la menor de edad quedó bajo protección del Grupo Especializado en Atención a la Violencia Familiar y de Género (GEAVIG).
Las autoridades mantienen las investigaciones abiertas y no se descarta que el caso derive en nuevas detenciones, dada la posible relación del agresor con redes del crimen organizado que operan en el norte de Quintana Roo.
Fuentes: Diario de Yucatán.