Por Ariel Irigoyen
La presidenta de la delegación local de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (CANACOPE), María Trinidad Guerrero Jiménez informó que por los efectos del huracán “Beryl” en Yucatán, se elevaron las tienditas de las esquinas ante la desesperación de la gente por tener alimentos durante el paso del fenómeno.
Dijo que hubo muchas compras de pánico en las tienditas de Mérida, los productos que la gente no logró comprar en tiendas de autoservicio ni de conveniencia social, decidieron ir por los alimentos en los tendejones por sus casas y rumbos.
Comentó que los tendejones tuvieron altas ventas de galletas, panes, pan para sándwich, barras de francés, muchos botellones de agua purificada, café, chocolate de mesa, harina y huevos para hot cake, longaniza, jamón y queso, enlatados, cerillos, velas, veladoras, aceite comestible, papel sanitario, pasta de dientes, jabón y pilas.
Recalcó que es importante que los ciudadanos tengan la cultura de la prevención antes, durante y después de un fenómeno meteorológico porque este tipo de meteoros son peligrosos y de ninguna manera, la gente puede confiarse ni bajar la guardia.
Finalmente, Guerrero Jiménez detalló que los ciudadanos luego de sufrir los embates por los huracanes “Gilberto” en 1988 e “Isidoro” en 2002, ante la amenaza de cualquier meteoro la gente toma sus precauciones para no estar desprotegidos durante el paso de algún fenómeno meteorológico, es bueno tener la cultura de la prevención.
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