Uber copió estrategia de Odebrecht… el soborno
Documentos internos revelan favores políticos, freno a leyes en diversos países y evasión fiscal
A medida que Uber se introdujo en todo el mundo, cabildeó con líderes políticos para que relajaran las leyes laborales, obstaculizó a reguladores y fuerzas policiales, canalizó dinero a través de las Bermudas y otros paraísos fiscales, según un informe publicado este domingo. Una ruta idéntica a la de Odebrechet, que consistía en sobornar para asentarse en algún país, incluido México.
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación examinó textos internos de Uber, correos electrónicos, facturas y otros documentos para ofrecer lo que denominó “una mirada sin precedentes a las formas en que Uber desafió las leyes de taxis y trastocó los derechos de los trabajadores”.
Los documentos fueron filtrados primero al periódico británico The Guardian, que los compartió con el consorcio.
En una declaración escrita, Jill Hazelbaker, portavoz de Uber, reconoció “errores” del pasado y dijo que al consejero delegado, Dara Khosrowshahi, contratado en 2017, se le había “encomendado la tarea de transformar cada aspecto de cómo opera Uber. Cuando aseguramos que es una empresa diferente, lo decimos literalmente: 90 por ciento de los empleados actuales ingresaron después de que Dara se convirtiera en director general”.
Fundada en 2009, la firma intentó evadir las normativas que regulan los taxis y ofrecer transporte barato. Los Archivos Uber del consorcio revelaron los intentos que ha efectuado la empresa para lograr establecerse en casi 30 países.
Los cabilderos de la compañía —entre los que se encontraban quienes fueron asesores del ex presidente de Estados Unidos Barack Obama— presionaron a funcionarios gubernamentales para que abandonaran sus investigaciones, reescribieran las leyes laborales y de taxis y relajaran la comprobación de antecedentes de los conductores, de acuerdo con los documentos.
Interruptor de emergencia
La investigación halló que Uber se valió de “tecnología furtiva” para eludir las investigaciones del gobierno.
La empresa utilizó un “interruptor de emergencia” que cortó el acceso a los servidores de Uber e impidió que las autoridades obtuvieran pruebas durante redadas en al menos seis países.
Durante una redada policial en Ámsterdam, según reportaron los Archivos Uber, el ex director general de la empresa, Travis Kalanick, emitió personalmente una orden: “Por favor activen el interruptor de emergencia lo antes posible (…) hay que cerrar el acceso en AMS (Ámsterdam)”.
El consorcio de periodistas también reportó que Kalanick consideraba las amenazas de violencia contra conductores de Uber en Francia por parte de taxistas agraviados como una forma de granjearse apoyo del público.
“La violencia garantiza el éxito”, les escribió Kalanick a colegas en un mensaje de texto.
En respuesta al consorcio, Devon Spurgeon, vocero de Kalanick, dijo que el ex director general “nunca insinuó que Uber debería aprovecharse de la violencia a expensas de la seguridad de los conductores”.
Los Archivos Uber también señalan que la compañía recortó su declaración fiscal en millones de dólares al canalizar ganancias a través de las Bermudas y otros paraísos fiscales, y luego “buscó desviar la atención de sus pasivos fiscales ayudando a las autoridades a recaudar impuestos de sus conductores”.
Fuente: Milenio