El hospital de Ticul funcionaría en junio de 2024

En Cacalchén ya tienen clínica del IMSS mejorada

A buen ritmo avanzan los trabajos de construcción del Hospital General de Zona en Ticul, proyecto que quedó inconcluso desde hace más de 10 años y que, gracias a las gestiones del gobernador Mauricio Vila Dosal, se reactivó para seguir transformando la salud en Yucatán y ofrecer una mejor atención a la población del sur del estado, informó ayer el gobierno estatal.

Según un boletín, el titular de la Secretaría de Salud del estado (SSY), Mauricio Sauri Vivas, en representación de Vila Dosal, y el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, recorrieron los frentes de la obra.

El nosocomio, al atender a vecinos del Sur, ayudará a reducir la demanda de los hospitales de Mérida.

Resultado de tres años de diálogo y gestiones de Vila Dosal ante la empresa Marhnos y la Federación, el gobierno estatal evitó un pago de $740 millones y recuperó el proyecto para reactivar el hospital de Ticul.

En 2011, el gobierno de Ivonne Ortega Pacheco firmó un convenio para construir un nosocomio en Ticul, bajo un esquema de Proyecto de Prestación de Servicios (PPS), con $5,500 millones que se iban a pagar a 25 años. Sin embargo, la administración de Rolando Zapata Bello canceló el acuerdo, lo que dio paso a un pleito jurídico.

En 2015, el Tribunal de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional condenó al Ejecutivo yucateco a pagar $740 millones, como indemnización por haber rescindido este contrato.

En campaña, Vila Dosal prometió a la gente de la zona de Ticul terminar esta obra, ya que desde 2011 la esperan. Al iniciar su administración, él se reunió con el presidente Andrés Manuel López Obrador para platicar de este problema, heredado de pasados sexenios, y acordaron trabajar juntos para resolverla: primero, para que el gobierno de Yucatán no tuviera que hacer el pago del fallo, ya que afectaría las finanzas estatales, y por otro lado, para que la gente de la región tenga el hospital que tanto necesita.

Por más de año y medio, Vila Dosal trabajó con el entonces consejero jurídico de la Presidencia de la República, Julio Scherer Ibarra, y con Marhnos, dando como resultado que la constructora Marhnos desista de la demanda y el Estado evite pagar los 740 millones de pesos.

Entonces, se firmó un convenio, en el que el gobierno estatal dio al IMSS el terreno y el edificio construido para reactivar el proyecto del Hospital de Ticul, lo cual avaló el Congreso local.

Ayer, el director del IMSS indicó que se calcula que el hospital esté finalizado en julio del próximo año, incluido el equipamiento.

Para ello, más de 200 trabajadores de la construcción laboran en 29 frentes.

“Esta obra es un ejemplo de trabajo en conjunto para hacer las cosas una realidad. Antes, este proyecto inconcluso era un agravio a la gente de la región, pero hoy ya tiene un rumbo para su puesta en operación”, añadió, ante el alcalde de Ticul, Rafael Montalvo Mata.

A la visita de supervisión también asistieron el delegado del IMSS en el estado, Alonso Juan Sansores Río, y del consejero Consejo Técnico del IMSS, José López Campos.

Ya avanzaron la demolición y el desmantelamiento de muros de tablaroca, instalaciones, muros tabique y fachada. Se trabaja en el proceso de reestructuración metálica y cimentación.

Se informó que el hospital tendrá 70 camas —30 para hospitalización por enfermedades generales y 40 para traumatología— y 15 especialidades, como terapia respiratoria, inhaloterapia, ginecología y obstetricia, telemedicina, medicina interna, física y rehabilitación, tococirugía, nutrición, imagenología y anatomía patológica, entre otras.

Beneficiará a 36,000 habitantes de Ticul y 10 municipios de la región, así como a más de un millón de derechohabientes en todo el estado con las 40 camas de traumatología.

Se programó terminar la obra en mayo de 2024, para luego equiparla, y que comience a funcionar en junio de ese mismo año.

En total, la inversión es de $1,073 millones: $636 millones para la construcción y $436 millones para equipamiento especializado.

Del terreno de 50,000 metros cuadrados, 19,000 serán de hospitalización.

De Ticul, Sauri Vivas y Zoé Robledo fueron al municipio de Cacalchén, donde entregaron la ampliación y remozamiento de la Unidad Médica de Salud IMSS Bienestar, obra que es parte del plan integral de desarrollo del Tren Maya.

Ambos funcionarios realizaron la develación de la placa, corte de listón de la renovada unidad médica y un recorrido por las instalaciones pasando por el Centro de Atención a la Salud del Adolescente, donde se brinda atención a este sector de la población enfocada principalmente en temas de planificación familiar, motivación personal, actividad física y, sobre todo, prevención de la obesidad.

La Unidad Médica del IMSS Bienestar de Cacalchén tiene 51 años y por primera vez recibió mejoras en beneficio de 6,800 usuarios, derechohabientes y gente son seguridad social.

Ahora, cuenta con consultorios, área de espera, medicina preventiva, farmacia y área de atención médica continua.

Nota original aquí 

Fuente: Diario de Yucatán