Embarcaciones clandestinas continúan capturando de manera ilegal al molusco en la costa de Yucatán.
Furtivos dedicados a la captura de pulpo continúan invadiendo las costas yucatecas y atacando de manera ilegal a la especie, a unos días de que se dé por iniciada oficialmente la temporada de captura del molusco.
A lo largo de los últimos meses, diversas lanchas ribereñas, han seguido dedicándose a la pesca furtiva de pulpo, a través de captura con variaciones de artes tradicionales de pesca, así como sumersión, al bucear a la especie; logrando capturas en la costa entre Dzilam y Chicxulub puerto, con entradas diarias estimadas entre 100 y 200 kilogramos por embarcación.
Dicha práctica realizada por hombres de mar y solapada por comerciantes que realizan la primera compra y traslado, tiene un amplio mercado en congeladoras del puerto de abrigo de este municipio, donde cotizan la especie extraoficialmente por arriba de $150 pesos por kilo, lo cual resulta sumamente remunerable.
Ante esta situación, pescadores en contra del furtivismo como don José Villanueva, de la comisaría de Chuburná puerto, se manifestaron enojados, ya que según dijeron que “debido al gandallismo de algunos, la pesca se ha ido deteriorando con los años, pues ya que no dejan que el pulpo crezca, se reproduzca y engorde, sino que lo matan antes de tiempo y con ello terminan con las esperanzas del sector, todo a cambio de unos cuantos pesos”.
Ante esto, han llevado a cabo reuniones con diversas partes del sector, las cuales han expresado de forma conjunta la necesidad de la intervención de las autoridades para poner freno a la depredación de la especie.
Gran parte de las capturas ilegales conseguidas por lo furtivos pertenecen a moluscos juveniles, clasificados como chicos, que no alcanzan la edad reproductiva, por lo que son eliminados antes de poder dar su primera cría, o en su caso pertenecen a especímenes femeninos en etapa de desove o de crianza, ambas situaciones impactan negativamente con la población y marca un grave problema de depredación irracional de la especie, lo que podría traer problemas graves en un futuro cercano.
Fuente: Novedades Yucatán/Gerardo Keb