Día Mundial de la Salud Mental: Estos son los síntomas de la depresión
La depresión clínica puede causar síntomas graves, incluyendo dolores físicos y deseo de morir, señala la OMS en el marco del Día Mundial de la Salud Mental.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que alrededor de 280 millones de personas padecen depresión, en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, que se conmemora este lunes 10 de octubre.
Aunque todas las personas pueden sentirse tristes o decaídas al pasar por algunos problemas personales, tener emociones negativas constantemente llega a convertirse en un problema de salud serio, especialmente cuando es de intensidad moderada a grave.
La también llamada “depresión clínica” o “trastorno depresivo mayor” deriva en síntomas graves respecto de cómo se siente, piensa y coordina actividades diarias como dormir, comer o trabajar. Y es una enfermedad que puede afectar a una persona de cualquier edad, sin importar la raza, economía o el nivel educativo, detalla el Instituto Nacional de Salud Mental (NIH).
¿Por qué se padece la depresión?
Aunque algunos casos de depresión se asocian con enfermedades como el Parkinson y la tuberculosis, generalmente, esta enfermedad se produce por la interacción de unos determinados factores biológicos como cambios hormonales o alteraciones en los neurotransmisores cerebrales como la serotonina, la noradrenalina y la dopamina, señala la Clínica Universidad de Navarra.
Del mismo modo, circunstancias estresantes en la vida afectiva, laboral o de relación y de personalidad pueden generar este trastorno.
La depresión puede ocurrir conjuntamente con otros trastornos mentales y otras enfermedades como diabetes, cáncer, enfermedad cardíaca y dolor crónico.
¿Cuáles son los síntomas de la depresión?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Mental (NIH), los síntomas de la depresión son los siguientes:
- Sentimientos persistentes de tristeza, ansiedad o ‘vacío’.
- Desesperación o pesimismo.
- Irritabilidad, frustración o intranquilidad.
- Sentimientos de culpa, inutilidad o impotencia.
- pérdida de interés o placer en las actividades cotidianas y pasatiempos favoritos.
- Cansancio, disminución de energía.
- Dificultad para recordar o tomar decisiones.
- Dificultad para dormir, o dormir demasiado.
- Cambios en el apetito o en el peso sin razón.
- Dolor de cabeza, calambres o problemas digestivos sin una causa física aparente, o que no se alivian ni con tratamiento.
- Intentos de suicidio o pensamientos sobre la muerte.
Fuente: El Financiero